Te contamos el país que pagará a los cazadores por abatir ciervos
Escocia pagará a sus cazadores por abatir ciervos. La medida responde a un plan experimental de conservación de la fauna ante un aumento poblacional de estos animales en determinadas zonas del país.
Más de 80 euros por los ciervos hembra adulta y la mitad por cada ejemplar joven, sea cual sea su sexo. Es lo que recibirán los cazadores por parte de la Agencia de Naturaleza de Escocia para incentivarles a aumentar las capturas sobre ciervos en un intento de solucionar un problema creciente como la sobrepoblación de la especie que se ha constatado durante los últimos 50 años. En parte, porque sus depredadores naturales han desaparecido o están a punto de hacerlo.
Cazadores al servicio de la biodiversidad
Y la caza se posiciona como la solución más eficaz al problema que ocasionan estos animales al entorno natural. Por ello, el descenso en sus poblaciones debe aumentar un 25%, según han estimado los técnicos de NatureScot. El ministro de Agricultura es el que ha hecho público el plan, afirmando que “Sabemos que Escocia se enfrenta a una crisis de pérdida de la naturaleza. La cantidad insostenible de ciervos está agravando el problema, ya que grandes poblaciones siguen dañando nuestra vida vegetal”. Al suroeste del Lago Ness, los cazadores deberán centrarse en una especie invasora introducida como es el ciervo sika. Junto a otras especies, como el ciervo rojo, devoran los árboles jóvenes de los proyectos de reforestación, eliminando además el hábitat para otras especies. Algo que dificulta el crecimiento de los bosques, un problema que el Gobierno de Escocia prioriza en su agenda para detener la pérdida de biodiversidad.
50.000 ciervos cada año
Las actuaciones tendrán lugar en las áreas más afectadas por el elevado número de ciervos, como son el cinturón central y las Tierras Altas. Se pretende cazar una cantidad anual de 50.000 ciervos, cuya gestión se registrará en una App donde se señalará la ubicación, se aportará evidencia fotográfica del abate y de cómo se procesaron los cadáveres de los cérvidos. Tras esto, el cazador recibirá una cantidad de 70 libras, unos 82 euros, por cada cierva adulta, y 35, unos 41 euros, por cada ciervo joven, ya sea macho o hembra. Pero la condición para cobrar este dinero será alcanzar la tasa mínima de sacrificio por cada 100 hectáreas, estipulada por la Agencia de Naturaleza.