Este es el vídeo del primer ataque de un lobo a un niño, grabado por la propia víctima
El móvil del niño lo grabó todo. Los gritos de la madre del menor consiguieron hacer huir al depredador y permitieron que el niño se levantase del suelo y corriera junto a ella.
La Asociación Nacional para la Protección del Medio Ambiente y la Vida Rural, una entidad que denuncia los ataques de los depredadores a la cabaña ganadera, ha denunciado un ataque protagonizado por un lobo y en el que la víctima ha sido un niño.
Una familia estaba pasando sus vacaciones en la costa adyacente a la meseta de Maine, en Savona, Italia
El ataque del lobo es grabado por el mismo niño
El menor está unos metros alejado de su madre. Ha sacado un teléfono móvil y está grabando a un animal que se ha acercado hasta pararse a escasos metros de distancia. La oscuridad de la noche entorpece que el dispositivo de grabación enfoque con claridad al cánido, pero su figura nos permite conocer la especie a la que pertenece. Poco después mostrará las bandas oscuras en sus patas, denominadas signatus.
Tras comprobar que no hay peligro, el animal avanza unos pasos en dirección al pequeño. Es cuando vemos con todo lujo de detalles que se trata de un lobo. Pero ya es demasiado tarde, el depredador comienza a lanzar sus ataques, falsos en un primer momento, tanteando a la presa que tiene delante, algo que aterroriza al niño, que llama desesperadamente a su madre.
Momento del último ataque del lobo, que consigue tirar al niño al suelo.
El lobo tira al suelo al menor
En una de esas acometidas, el cánido consigue tirar al suelo a la víctima, que grita de dolor. Gracias a los gritos de la madre, el lobo queda inmóvil, esperando a ver qué sucede, unos segundos que aprovecha el chico para levantarse y huir corriendo hacia el lugar donde se encuentra la tienda de campaña. Un suceso impactante que nos deja en la mente la lógica pregunta ¿Qué habría sucedido si la madre no hubiera estado cerca?
Datos aportados sobre el ataque
La familia se encontraba acampada en una tienda de campaña en un lugar colindante a una carretera en la Meseta de Maine, también muy cerca del mar y de los densos bosques entre Finale Ligure y Spotorno.
Se trata de un entorno natural caracterizada por muchos prados y la presencia de numerosas cuevas que estuvieron habitadas en tiempos prehistóricos. En el Manie también se puede encontrar mucha vida silvestre, incluyendo una población cada vez más elevada de lobos.
Sucedió durante la noche del pasado 15 de agosto, jueves. El animal ha sido identificado como un lobo apenino, Canis lupus italicus, una recientemente reconocida como subespecie de lobo endémica hasta hace poco tiempo de la Península Itálica. Su tamaño oscila entre 100 y 150 centímetros de longitud, y pueden pesar entre 25 y 40 kilos. Están cubiertos por un pelaje que mezcla tonos grises y marrones, pero se ha constatado que aproximadamente un 20% de los ejemplares de la especie son de color negro.
La familia intentó contactar con los guardabosques de Savona y con la policía municipal de Finale Liguria, pero, como así constatan desde la organización rural, nadie respondió a las repetidas llamadas.
Se trata de la primera vez que se filma en Italia una interacción tan agresiva entre un humano y un lobo, a pesar de que se han constatado ataques en el país, pero no han sido filmados.