Especialista en cazar enormes jabalíes que cargan e intentan embestirle
Un cazador turco se ha convertido en un verdadero experto a la hora de parar las peligrosísimas embestidas de gigantescos jabalíes que intentan atacarle en numerosas ocasiones.
El primer lance que seleccionamos cuenta con una emoción desbordada. Los perros trabajan en el interior del monte. Laten a parado y, poco después, en carrera, persiguiendo al jabalí. El cazador lo sabe. Se trata de Selçuk Poslu. Acumula cientos de horas ‘leyendo la labor de estos rastreadores especializados en localizar a los cochinos y empujarlos hasta dar la cara con respecto a su propietario. Se trata de una modalidad venatoria que mezcla elementos de nuestra batida y de la caza al salto.
Y esto es precisamente lo que sucede. Los canes siguen al jabalí ‘anunciando’ su llegada al postor con la antelación suficiente como para que se prepare encarando su escopeta y eligiendo el momento preciso para realizar un disparo que no ponga en peligro la integridad de los perros.
Un gran navajero se refugia en un canal de riego
Estos jabalíes son tan grandes que se convierten en ‘carros blindados’ si la munición no alcanza una zona vital. Y cuando estos macarenos resultan heridos, el peligro que llevan consigo se multiplica exponencialmente. Por esto, la eficiencia y la rapidez de reflejos del cazador deben ser cualidades muy desarrolladas, como podemos ver a continuación, para solventar el lance de la manera más segura, tanto para los perros como para el propio cazador.
Un mastodonte con largos colmillos carga contra el cazador
Como colofón, hemos dejado para el final este terrorífico lance en el que un imponente animal dotado de unas navajas larguísimas y afiladas carga con toda su potencia física contra el cazador. Un comportamiento muy repetido cuando estos magníficos animales descubren cerca de ellos la presencia del ser humano.
Afortunadamente, como hemos dicho al principio, este aficionado a la caza del jabalí se ha convertido en un experto en frenar las acometidas de los cochinos, por muy peligroso que resulte, y siempre lo hace salvaguardando la integridad de sus queridos perros rastreadores.