Nico el jabalí adopta un joven escudero
Hace dos meses que el macho, de un año de edad, acompaña al macareno en sus correrías. No ha sido fácil grabar al joven ejemplar junto al imponente jabalí de ocho años, pero Juan Carlos Rubio se ha ganado su confianza a base de paciencia.
Estas imágenes confirman la creencia extendida entre los cazadores de que los grandes machos acogen a otros ejemplares de su mismo sexo y de menor edad. Nico tolera la presencia tanto de este joven macho como la de Lola. La hembra fue rescatada en junio del pasado año por el guarda rural cuando quedó atrapada en el interior de una balsa de riego. Desde ese día, Nico y la cochina son inseparables.
Cuando se trata de compartir la comida el viejo jabalí no tiene amigos
Nico llegó a las manos de Juan Carlos Rubio cuando era un rayón. A su madre la atropelló un vehículo. Desde el momento en el que el cochino pudo valerse por sí mismo se encuentra en libertad.
Jabalí y escudero: ¿realidad o un mito extendido entre los cazadores?
El profesional lo visita a diario en su lugar de encame en invierno. En verano, ante la falta de comida en el monte, proporciona al macho, al escudero y a la hembra, sustento en forma de maíz. En una de las venidas de los cochinos al expendedor de grano, el macareno embiste al joven macho para que se aleje del alimento. Entre los jabalíes existe una jerarquía para el acceso a la comida y a las bañas de barro, y la piara de Nico no es una excepción.
Javier Fernández
