Un gato planta cara a un lobo cuando trata de cazarlo
El felino parece una presa fácil para el lobo. Pero el gato no se amilana ante la presencia del super predador. Todo lo contrario, cuando el cánido salvaje se encuentra a pocos centímetros de él arquea la espalda y eriza los pelos del cuerpo. Esta reacción despista al lobo permitiéndole huir.
Estas imágenes han sido publicadas en el blog personal de Facebook Il Nuovo Cacciatore Piemontese. El propietario de la cuenta asegura que han sido grabadas en una zona de siembra de Savigliano, comuna italiana situada en la provincia de Cuneo, en la región del Piamonte.
El cazador cazado
El lobo sorprende al gato en una parcela en la que ha sido recolectada la cosecha mientras está acechando a una garza real y tres garcetas. La reacción del felino al verse descubierto es agazaparse para tratar de pasar desapercibido a los ojos del cánido. El lobo también opta por la misma posición para intentar atrapar a su presa. Se aproxima lentamente. El felino apuesta por permanecer en el suelo para tratar de salvar la vida. El súper depredador, cuando cree que tiene a su alcance al gato, se lanza en una veloz carrera para capturarlo.
El valiente gato lucha por su vida
En el momento que parece todo perdido para el felino decide enfrentarse al cánido. La piloerección del gato sorprende al lobo. El cánido cambia bruscamente de dirección cuando el felino está a pocos centímetros de sus fauces. Este momento de confusión es aprovechado por el gato para huir. El súper depredador decide abandonar la caza y no persigue al felino, pese a que la diferencia de velocidad y peso entre ambos lo convierten en una presa fácil para el lobo.
