75 gallinas muertas por perros y medios digitales acusan indirectamente y sin pruebas a los cazadores
El ataque de varios perros a unas gallinas de una explotación ecológica en Tenerife está siendo investigado por la Guardia Civil. La dueña de las instalaciones ha acusado a perros de cazadores y algunos medios digitales lo han afirmado sin pruebas.
Contrastar la información ofrecida debería ser la obligación de cualquier medio de comunicación, independientemente de la tendencia u ideología política o las creencias personales. Tener acceso a información verídica debería ser el derecho de cualquier persona. Por desgracia, en ocasiones, no es así.
Los hechos
En el día de ayer la explotación ecológica “La Jara” de Tenerife compartía en sus redes sociales un vídeo en el que muestran los cadáveres de decenas de gallinas. La mujer, la propietaria, aunque asegura no estar en contra de los cazadores, alude a los perros de los cazadores como autores de la matanza ocurrida en sus instalaciones el pasado jueves.
“…Una jauría de perros de caza entró en la finca y arrasó la vida de 60 gallinas ponedoras y 15 gallinas de raza canaria…” —escribe en la publicación.
Como es normal, la mujer acudió a denunciar los hechos ante la Guardia Civil quienes se encuentran, en este momento, investigándolos. También se ha puesto en contacto con la Federación Insular de Caza de Tenerife. La proximidad de un campo de entrenamiento de perros de caza es lo que la lleva a deducir que se trata de perros de cazadores, pese a haber afirmado no estar segura.
No hay ninguna evidencia por el momento de qué perros fueron los responsables del ataque y por ende, que legitime su acusación.
Los responsables deben asumir las consecuencias
No vamos a osar, por supuesto, valorar si los dueños de los canes son o no cazadores hasta que las investigaciones de la Guardia Civil arrojen luz sobre lo sucedido. Sí queremos, sin embargo, hacer algunas apreciaciones al respecto.
Sea quien fuere el dueño de los perros, cazador o no, debería haber asumido las consecuencias y haber corrido con los gastos en lugar de huir cobardemente.
A cualquier persona que tenga perro le podría ocurrir algo así, y aunque es un hecho triste que nadie desearía que ocurriera, es algo posible. Los animales tienen un instinto innato y cualquier persona puede tener un despiste. Eso, sin embargo, no exime de hacer frente a los acontecimientos y cumplir con la obligación de pagar los daños.
Algunos medios ya señalan a perros de cazadores en sus titulares
A raíz de la publicación del vídeo en redes, otros medios de comunicación si han osado a culpar, sin tener ninguna prueba, a los perros de cazadores, Escribiendo en sus titulares “perros de caza” están utilizando una información aún no contrastada por las autoridades competentes para incriminar e indirectamente, desprestigiar, a un colectivo entero.
