PACMA fracasa de nuevo: el partido animalista no consigue ni un solo escaño en las elecciones generales

El partido político que se constituyó en 2003 y que coordina Javier Luna, ha abanderado desde sus inicios la defensa de la vida animal por encima de todo. Por encima incluso de las personas, lo que lo ha convertido en uno de los principales enemigos del sector cinegético. Su militante, Ana Martín, o la que ahora forma parte ahora de la formación política “Sumar”, Aida Gascón, no han dudado en insultar públicamente a los cazadores. Sus seguidores y votantes, además de seguir ese ejemplo también desearon la muerte a las personas que practican la actividad cinegética a través de redes sociales.

El animalismo radical vuelve a fracasar

Yolanda Morales, portavoz de PACMA y candidata a la presidencia por este partido, quien se refirió a los cazadores como maltratadores y a la caza como “una especie de enfermedad mental”, infravalora constantemente la actividad cinegética, haciendo referencia a quienes la practican como unos pocos. Una apreciación que dista mucho de la realidad, cuando fueron medio millón de personas las que estuvieron presentes en el 20M.

Lo que es un hecho contrastado es su estrepitoso fracaso el pasado domingo durante las Elecciones Generales del 23 de julio en el que no obtuvieron ni un solo escaño.

¿Quiénes son, entonces, unos pocos? Los votos que obtuvo el partido animalista no llegan a 164.000, es decir, les ha votado menos de un 0,7 de la población. Un porcentaje ínfimo que no les ha permitido tener representación en el Congreso.

Insultos y deseos de muerte a cazadores

En las redes sociales de PACMA, no sólo se defiende a los animales, también se insulta y se desea la muerte a personas. Los seguidores y votantes de PACMA hacen comentarios con los que se retractan.

“Tendrían que eliminarlos a ellos directamente”

“Psicópatas en potencia”

“Son personas obsesionadas con matar (…) si no fuera ilegal saldrían con la escopeta matando a personas por la calle”

“Le disparan a todo lo que se mueve”

“No sobran animales sobran sus asesinos”

“Son personas enfermas mentalmente son un peligro para la sociedad”

“La vida de los cazadores no vale NADA”

“¿Para qué son útiles los cazadores? Para nada, son una carga para la sociedad, ignorantes e inútiles, psicópatas y asesinos (…) Deberían ser desechados como materia tóxica”

“Ellos (los cazadores) tendrían que estar encerrados, esos tarados”

“Inmundos cazadores, ignorantes, malnacidos”

“Si tengo que matar a alguno por ver como mata a un animal, lo voy a hacer”

Estos son sólo algunos ejemplos de las faltas de respeto que representan la completa deshumanización de quienes dicen defender la vida animal pero se dedican a amenazar, desear la muerte e insultar a otras personas.