Una coneja amamanta a una camada de gazapos a plena luz del día
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Una coneja amamanta a una camada de gazapos a plena luz del día

Con el avance de la primavera, los campos se han llenado de vida. Las aguas caídas en mayo han favorecido que una nueva generación de conejos haya nacido en nuestros campos.


En algunas zonas de la Península Ibérica en las que habían disminuido notablemente las poblaciones de conejos estos últimos años se están viendo un gran número de gazapos. Este hecho ha colmado de esperanzas a los cazadores de cara a la próxima temporada.

¿Dónde paren los conejos?

Los conejos construyen sus parideras bajo tierra. Excavan en el suelo pocos días antes del parto una oquedad en la que prepararán un nido con los materiales que tenga a su alcance, incluso con su propio pelo. Allí darán a luz y amamantarán a sus crías. La hembra.

Cada vez que visite la gazapera, descubrirá la entrada para volver a cubrirla con tierra al marcharse para evitar que los depredadores la encuentren.

 

Así se desarrolla la gestación de los conejos

El período de gestación de los conejos oscila entre 29 y 35 días, tras los cuáles nacen los gazapos desprovistos de pelo y ciegos. El periodo de lactancia dura en torno a un mes.

Gran parte de estos gazapos no alcanzará la edad adulta como consecuencia de las enfermedades y la depredación. El conejo es una especie de vital importancia para la supervivencia de al menos treinta especies, como son el zorro, meloncillo, gato montés, búho real o diferentes especies de rapaces, pero sobre todo para dos especies catalogadas en peligro de extinción, el águila imperial ibérica y el lince ibérico.

 


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