Un reclamo de perdiz roja de dos celos adopta a dos pollos que habían quedado huérfanos
Un macho de perdiz es perfectamente capaz de criar a sus pollos. Pero no solo a los suyos. Te contamos la historia de un reclamo que ha adoptado a unos polluelos huérfanos.
Motillita es un bravo macho de perdiz roja al que su propietario le ha abatido esta temporada más de una decena de perdices autóctonas. A pesar de tratarse de un valiente perdigón, la nobleza del pájaro le ha llevado a acoger a dos pollos con escasos días de vida.
Una brava perdiz en el campo y dócil en casa
El protagonista de esta bonita historia es propiedad de los cazadores gaditanos José Miguel y Encarni. El pájaro llegó a las manos de los algecireños hace dos años. Gracias a los mimos y cuidados de los reclamistas, ha creado un vínculo con ellos que trasciende a la caza.
El pájaro, como podemos ver en las imágenes, permanece durante el día libre en la casa de los cazadores. Según los reclamistas, "esta perdiz nos ha sorprendido por su bravura a la hora de enfrentarse con los pájaros autóctonos".
El macho de perdiz es un pájaro muy bravo en el campo.
¿De qué se alimentan las perdices rojas en estado salvaje?
Las patirrojas siguen una alimentación omnívora. Basan su dieta en nutrientes de origen vegetal. Los adultos son eminentemente herbívoros durante las estaciones frías, aumentando la ingesta de invertebrados en primavera y verano. Se alimentan sobre todo de semillas de plantas herbáceas, hojas, raíces y frutos.
La alimentación de los pollos de perdiz en las primeras semanas de vida: insectos
Los perdigones necesitan para desarrollarse un gran aporte de proteína de origen animal durante el primer mes de vida. La ingesta de alimentos con un alto contenido proteico es vital para el crecimiento de los pollos. Según un estudio realizado por la Universidad de Córdoba, "A la semana de vida, su dieta está compuesta por un 66% de invertebrados y un 33% de semillas y flores.
A las dos semanas su alimentación se invierte e ingiere un 66% de semillas y flores y un 33% de invertebrados. A las tres semanas, cuando se pueden considerar adultos, siguen consumiendo un porcentaje mayoritario de vegetales, un 97% que se reparte entre semillas, frutos, hojas, raíces y flores, el resto lo aportan los insectos y los líquenes".