Cuando los animales silvestres se adentran en las ciudades: espectacular vídeo de un alce en un cine comiendo palomitas
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Cuando los animales silvestres se adentran en las ciudades: espectacular vídeo de un alce en un cine comiendo palomitas

Las cámaras de seguridad del cine graban la entrada de un alce hambriento en el edificio atraído por el olor de las palomitas y las hamburguesas.


Los trabajadores de un cine en Alaska (EE UU) se quedaron atónitos cuando un alce entró al edificio para darse un festín de palomitas de maíz.

Eran las 9 pm cuando un enorme alce apareció en el vestíbulo de los Cines Kenai. Las cámaras de videovigilancia consiguieron grabar el momento de la llegada de este animal de los bosques nórdicos. La encargada había dejado la puerta abierta para renovar el aire del local.

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El enorme animal en el interior de los cines.

Un alce buscando comida en el interior del cine

El animal se paseó tranquilamente por el vestíbulo del local. El hambriento alce decide no perder su tiempo y comerse las palomitas de maíz que había sobre una bandeja. Posteriormente, rastreó sobre los cubos de basura y encontró una caja de los conocidos menús infantiles de Mc Donald's. Fue entonces cuando el alce no se lo pensó dos veces y atrapó la bolsa de patatas fritas del menú. También intentó hincar el diente a una hamburguesa, pero acabó con el envoltorio enganchado en su hocico.

Solamente había una encargada cuando apareció inesperadamente este alce, y su reacción describe perfectamente la sorpresa que se llevaron después todos los que tuvieron conocimiento del suceso y que se encontraban disfrutando de las películas de este cine americano. La empleada no dio crédito y grabó con su teléfono la experiencia con este mamífero

@monkeywrenchak

Moose goes in to Kenai, Alaska movie theater!

♬ original sound - Ira Chikoyak

 

Tras saciar su apetito, el alce escapó por la misma puerta por la que entró gracias la ayuda del director del cine y otro empleado, que lo dirigieron por la salida.

 

¿Acabaremos viendo a los jabalíes en los cines de España?

Aunque el video del alce provoque simpatía, no deja de recordarnos la problemática de la sobrepoblación de los jabalíes y su cada vez más usual  y creciente presencia en las ciudades y pueblos de la geografía española en los últimos años.

Los jabalíes son animales omnívoros que pueden comer prácticamente cualquier cosa. Aunque su dieta natural consiste en frutos, raíces y pequeños animales, también son conocidos por alimentarse de cultivos, jardines y basura. Esto significa que cuando se acercan a las zonas urbanas, pueden encontrar fácilmente alimentos disponibles en los jardines y las calles. O en las cafeterías.

La situación se ha vuelto tan grave que muchas comunidades autónomas han tenido que tomar medidas para controlar la población de estos suidos. En algunas regiones, se han autorizado cacerías especiales para reducir la cantidad de animales. En otras, se han instalado vallas o barreras para evitar que los jabalíes entren en las zonas urbanas.

Se han convertido además en habituales las imágenes nocturnas de grupos perfectamente alineados campando a sus anchas por calles urbanas en busca de alimentos, lo que está provocando accidentes de tráfico. O comiendo de los contenedores.

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Son incontables también las noticias publicadas estos últimos años desde la pandemia que testifican la presencia de los jabalís urbanitas, así como de accidentes de trágico provocados por estos o incluso de algún ataque directo al ser humano.

Los jabalíes aumentan las poblaciones a un ritmo imparable. De seguir esta tendencia, y ante la falta de depredadores naturales que lo combatan, la previsión es que el número de jabalíes pueda llegar a duplicarse en el año 2025. Hay una opinión generalizada: han perdido el miedo a las personas, a los que ahora ven como proveedores de alimentos.

Es un problema cada vez más frecuente que requiere de la atención y la acción de las autoridades.

Es necesario tomar medidas para controlar su población y evitar los conflictos entre humanos y animales, así como los daños al medio ambiente o de lo contrario cualquier día estaremos sentados tomando un aperitivo en una terraza, compartiendo “mesa y mantel” con ellos.

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