Tres burros repelen el ataque del lobo a varios ciervos

El lobo va tras los ciervos. Son sus presas naturales y han decidido intentar su caza. Pero, para llegar hasta el lugar donde descansan los venados, ha de pasar por el terreno donde pastan los burros.

Pedro, colaborador habitual de Club de Caza, nos confirma el lugar donde ha grabado las curiosas imágenes, en el término municipal de Peguerinos, en el límite entre Ávila y Madrid. El propio autor explica la situación de la mejor manera aludiendo a la utilidad del burro en la guarda del ganado:

-“Mucho se ha hablado de la utilización de burros para la protección del ganado ante los ataques del lobo. Estos animales hacen gala de un agudo sentido del oído y de un excelente olfato. Son fuertes y resistentes y su sonoro rebuzno alerta a todo animal que se encuentre cerca de la presencia del lobo”.

Las imágenes han sido tomadas recientemente cayendo la tarde, momento en el que los ciervos descansan tumbados en el suelo. Pedro se percató del intento de ataque del depredador, y acudió rápidamente a su cámara para inmortalizar el momento.

Así nos lo explica el autor de la grabación:

-“Cae la tarde en una zona de prados de montaña y tres ciervos descansan tumbados tranquilamente cercanos a tres burros que pastan tranquilamente. De repente, los asnos se inquietan, detectan algo. Con las orejas inhiestas, se dirigen hacia el cánido y lo persiguen furiosamente hasta que el animal desaparece de su vista. Pero el lobo no olvida y se agazapa a unos metros de los ciervos y espera su paso para perseguirlos velozmente”.

¿Coexistencia lobo-ganadería?

¿Es posible la coexistencia lobo-ganadería? Durante siglos nuestros ancestros desarrollaron técnicas preventivas para proteger a su ganado del ataque del lobo, técnicas que tras el exterminio del gran depredador de muchas zonas de la Península Ibérica desaparecieron el olvido. Hoy, con el retorno del lobo a zonas donde había sido cazado, esas técnicas también se deben recuperar.

Como demuestra el video, son efectivas, pero nunca se debe olvidar el apoyo a los hombres que trabajan cada día en nuestro campo para ganarse la vida en un sector demonizado y minusvalorado cargando sobre sus hombros los daños colaterales de la defensa dogmática de una especie como cúspide de la protección de un habitad humanizado que poco a poco se extingue , defensa la lobo , larga vida al lobo, pero también al sector primario y a esas tradiciones milenarias que desde ciertos círculos se demonizan y critican”.

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