¿Están demonizando al conejo de monte?
Polémica

¿Están demonizando al conejo de monte?

El conejo híbrido. Parece el título de una película de terror, pero es uno de los titulares más repetidos de los últimos meses. Esos pequeños lagomorfos se han convertido en la pesadilla de muchos agricultores que están decididos a acabar con ellos.


¿Hay más conejos que hace diez años? ¿Son distintos? ¿Ocasionan más daños a la agricultura? Interrogantes que conllevan respuestas que pueden determinar el futuro de estos animales en nuestro país. La demostración de que estamos ante una especie resultado de la hibridación y, por tanto, invasora, podría llevarla a la total erradicación.

¿Ha cambiado el conejo en España?

Los agricultores lo tienen claro. Hablan de una plaga de conejos híbridos resultantes del cruce del conejo de campo con especies domésticas. Los describen como más grandes, voraces, con mayor capacidad para procrear, capaces de trepar y de resistir las tradicionales enfermedades que diezman las poblaciones de lagomorfos en nuestro país, como son la enfermedad hemorágico vírica y la mixomatosis.

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Mapa elaborado por COAG que detalla las provincias afectadas por la sobrepoblación de conejos.

Esta creencia, fuertemente defendida por los agricultores de muchos puntos de nuestra geografía, ha llevado a los profesionales del campo de Castilla-La Mancha a enviar ejemplares capturados en el campo a un laboratorio de Portugal para que coteje por ADN si se trata de una nueva subespecie. No se fían de los resultados de los laboratorios nacionales, llevados a cabo por el IREC de la mano de investigadores como Rafael Villafuerte, uno de los máximos exponentes en cuanto a estudios científicos con el conejo de monte como protagonista. Este científico del IESA-CSIC ha analizado la genética de distintos ejemplares capturados en Castilla-La Mancha sin encontrar anomalías en el ADN y asegurando que “los conejos de la región son genéticamente idénticos a los que ha habido siempre”.

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Jurassic Park cunícola, la última campaña que denuncia los daños de los conejos en los cultivos.

Dos subespecies de conejo que encontramos en España

Hay que dejar claro que, dentro de la misma especie, en nuestro país podemos toparnos con dos subespecies de Oryctolagus cuniculus, el algirus, más común en el sur peninsular, y el cuniculus, localizado en la parte central y norte de España.

Las escasas diferencias entre ambos radican en el tamaño, de manera muy sutil, en el sur son más pequeños, y, sobre todo, en la resistencia a las enfermedades citadas, que es menor y, por tanto, sus poblaciones se ven más reducidas cuando la mixomatosis y la NHV azotan cada año.

Por su parte, los conejos ‘norteños’ viven en comunidades más numerosas y han sido capaces de desarrollar una mejor resistencia a las enfermedades. Desde la comunidad científica se apoyan en este hecho para explicar la explosión de sus poblaciones y el consecuente daño que causan más conejos en el mismo espacio.

Desde el Instituto Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) niegan esa hibridación entre cualquiera de estas dos subespecies y otra especie doméstica de conejo, pero sí han constatado que el algirus y el cuniculus se crucen entre sí.

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Daños registrados en cultivos de La Rioja. Foto COAG.

¿Los conejos ocasionan más daños en los cultivos?

Mientras los agricultores aseguran que las pérdidas causadas por el hambre voraz de los conejos ascienden a 800 millones de euros que afectan a un millón de hectáreas de cultivo, Agroseguro ha hecho públicas las cifras que implican daños ocasionados a los cultivos por especies silvestres, detallando el papel de los conejos en estos números, que es la especie más dañina para los agricultores en España, por delante del jabalí y del corzo.

Así, la Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados abonó el pasado año 2022 la cifra de 8,52 millones en indemnizaciones por daños causados por la fauna en 118.558 hectáreas reclamadas, de los que 4,05 millones se destinaron a indemnizar daños ocasionados por conejos en un total de 55.772 hectáreas, sobre todo en cultivos herbáceos, viñas y hortalizas.

Esta cifra económica prácticamente no varía desde 2020, pero la aseguradora subraya que sí supuso un incremento con respecto a 2019 en las provincias más afectadas, que son, en este orden, las de Castilla-la Mancha, Aragón, Castilla y León, Cataluña y Madrid. Pero parece que esto cambiará en 2023.

¿Conejos híbridos?

Si se trata de una estrategia de márketing, ha resultado brillante. Los titulares de los medios de comunicación repiten una y otra vez el adjetivo “híbrido”. Y no olvidemos que se trata de una afirmación sin respaldo científico. Al menos hasta el momento. Incluso se ha llegado a autorizar y contratar el uso de veneno para erradicar a los lagomorfos en determinadas zonas de Lérida. La terminología apocalíptica parece ser la estrategia tomada por los que exigen un control exhaustivo de la especie en los campos de labor. Estos días hemos conocido la expresión “Jurassic Park cunícola en el campo español”, algo que ha funcionado y que ha sido recogido por muchos medios de comunicación.

¿Qué supondría demostrar que se trata de conejos híbridos?

La total erradicación. Respondiendo a la política de acabar con las especies invasoras en nuestros entornos naturales, si los estudios que han emprendido los agricultores castellano manchegos demuestran de manera científica que los conejos que campan por los campos de cultivo son resultado de la hibridación y, por tanto, distintos a la especie autóctona, se procedería a la declaración de plaga y a instaurar las medidas necesarias para su total erradicación. Las investigaciones genéticas y fenotípicas aportarán la respuesta definitiva.

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