Pickups de la muerte y fosfuro de aluminio: las polémicas medidas para combatir las plagas de jabalí y conejo en Cataluña
Cataluña

Pickups de la muerte y fosfuro de aluminio: las polémicas medidas para combatir las plagas de jabalí y conejo en Cataluña

Los cazadores están obligados a abatir miles de jabalíes y cientos de miles de conejos. Y, si no lo hacen, intervendrá la administración, es decir, los agentes rurales y empresas privadas. Algo que ya está sucediendo.


La Emergencia Cinegética funciona de la siguiente manera: los agricultores formalizan sus quejas y denuncias sobre los daños recibidos por las especies cinegéticas, como es el caso del jabalí o del conejo. Si los cazadores nos son capaces de alcanzar las cifras estipuladas por la Administración, a pesar de los muchos esfuerzos que realizan, tanto en tiempo invertido como en gasto económico, será esta la que tome las medidas que considera oportunas. Y estas, hasta el momento, han entrado de lleno en el campo de la polémica.

Agentes Rurales especializados en controlar especies cinegéticas

Desde Cataluña, se informa a esta redacción que incluso se han organizado cursos de formación a Agentes Rurales para su especialización en el control de especies cinegéticas, donde han aprendido el uso de la visión nocturna y térmica, el de armas semiautomáticas, medidas de control poblacional…, creando así una sección especializada.

En Club de Caza ya hemos explicado la labor de las conocidas como “pickups de la muerte”. Lo último que nos cuentan es que la Generalitat ha dotado a estos vehículos de ‘equipamiento safari’ para poder disparar de manera cómoda y segura desde la terraza de estos todoterreno, incluso en marcha.

 

Los cazadores, en contra de la aniquilación de animales

Los presidentes de los cazadores de las sociedades catalanas están en contra, porque cuando entra la pickup en un coto, acaban con todo lo que se crucen, ya sean hembras gestantes, rayones… La orden es matar todo jabalí que encuentren. Tras llevarlo a cabo, y como han documentado compañeros cazadores de las zonas afectadas, sobre todo en la provincia de mayor sobrepoblación del jabalí, que es Girona, sus cuerpos acaban en contenedores de basura.

«No van a dejar un jabalí vivo», la denuncia de un cazador ante un nuevo contenedor lleno de animales

La Orden de Vedas de Cataluña detalla en su articulado la autorización legal diseñada para la actuación de los Agentes Rurales:

6.1.4 Por motivos de urgencia como consecuencia de la presencia de ejemplares conflictivos de individuos de especies cinegéticas y de ejemplares de las especies incluidas en esta Resolución que comporten un riesgo inminente para las personas, sus bienes o el medio natural, las personas titulares de la dirección de los servicios territoriales correspondientes del departamento competente en materia de actividades cinegéticas pueden autorizar con carácter excepcional a los/las miembros del cuerpo de Agentes Rurales, y en caso de necesidad a otros agentes de la autoridad, a actuar capturándolos mediante el uso de arma de fuego o de métodos de captura en vivo o de inmovilización a distancia para evitar los daños o minimizarlos. Las capturas deben notificarse a las personas titulares de la dirección de los servicios territoriales correspondientes del departamento competente en materia de actividades cinegéticas.

6.1.5 Las autorizaciones excepcionales para capturar especies cinegéticas que causen daños a la agricultura y a la ganadería podrán incluir una autorización específica para la actividad cinegética en las zonas de seguridad de infraestructuras viarias y pasos de fauna, siempre que sea comunicada al ayuntamiento correspondiente y al cuerpo de Agentes Rurales, haya una limitación en el número de días y el horario y esté asegurada la seguridad para las personas y sus bienes.

Conejo: veneno y capturas desorbitadas

Con respecto al conejo, la situación es similar, pero con diferencias como la ubicación de las actuaciones que se están llevando a cabo desde fuera del sector de la caza. La Generalitat ha comenzado a envenenar madrigueras en áreas que limitan con infraestructuras como carreteras, canales de canalización de agua, riego o vías de tren. Lo hacen con fosfuro de aluminio, una sustancia que se ha demostrado que ha conllevado afectación a humanos, incluso llegando a ocasionar la muerte de personas por intoxicación directa. Estamos ante un elemento químico muy tóxico.

 

Pero la declaración de Emergencia Cinegética supone la obligación de acabar con 301.640 conejos hasta el plazo límite, establecido en el mes de septiembre. Esto conlleva que en cada uno de los 91 cotos afectados en Lérida por dicha declaración, los cazadores deben alcanzar un mínimo de capturas. Si no consiguen a fecha de 15 de abril haber alcanzado la elevadísima cifra de 226.196 conejos abatidos, el Departamento de Acción Climática intervendrá y se dará paso a las cacerías nocturnas, a los cuerpos especiales de agentes rurales, jaulas trampa, trampas mecanizadas

Agricultores armados contra conejos y jabalíes

Otra opción que lleva años debatiéndose es permitir a los agricultores ir armados al campo y que pueda realizar las acciones de control poblacional de las especies cinegéticas que ocasionan daños en sus cultivos. Es una iniciativa propuesta por Unió de Pagesos, que asesora a los agricultores y ganaderos que nunca quisieron ser cazadores, pero que tramitan la licencia y el permiso de armas para poder actuar en las tierras que trabajan. Algo que, por el momento, deben realizar de acuerdo con los gestores del coto de caza y los agentes rurales.

 


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