La caza del jabalí en batida con rifle de palanca
Un joven cazador gerundense ha elegido para la caza de cochinos un rifle de palanca de la marca Marlin modelo 1894 del calibre 44 Magnum. Uno de los últimos jabalíes abatidos por el montero con esta mítica arma pesó 130 kilos.
Un rifle con acción de palanca es un arma que emplea un mecanismo situado alrededor del guardamonte, para introducir un nuevo cartucho en la recámara del cañón cuando es accionado. Este término también es utilizado para describir diversos fusiles monotiro con cerrojo levadizo que emplean este sistema para ser recargados.
Las marcas de armas Marlin y Winchester comenzaron a producir este tipo de arma en 1894. Posteriormente la empresa Savage Arms Company fabricó un fusil de palanca para caza con este sistema, el Savage Modelo 99. La mayoría de armas de palanca no están preparadas para soportar presiones altas como las de cerrojo o semiautomáticas, de ahí que utilicen munición que producen presiones bajas o medias, como el 30-30 Winchester o el 44 Magnum.
La caza de grandes jabalíes con rifle de palanca añade un encanto especial.
Abate un jabalí de 130 kilos en una cacería social
No es el primer ejemplar de estas características que abate Eloy Carbonés con la colla de Sant Hilari Sacalm, municipio de la provincia de Gerona, situado en la comarca de la Selva. Al igual que la mayoría de grandes cochinos que ha abatido a sus 22 años, lo ha hecho con el rifle de palanca que le regaló su padre cuando obtuvo la licencia de caza y el permiso de armas. El montero es un enamorado de este tipo de armas. La munición que utiliza habitualmente es la bala Hornady Lever Revolution de 225 grains.
Este es el trofeo del gran jabalí.
El cazador ha abatido varios jabalíes medallables
Uno de los animales de mayor tamaño que ha cazado lo abatió la pasada temporada en una cacería organizada por su colla y otra de la zona. Una hora y media después de haberse producido la suelta de los perros Eloy oyó una ladra. Segundos más tarde vio como un enorme cochino se dirigía por una vereda hacia su postura. El cazador gerundense esperó que estuviera a menos de 10 metros para abatirlo de un certero disparo de su rifle Marlin modelo 1894 del calibre .44 Magnum.
Javier Fernández
