Tras el rastro de un jabalí de 20 centímetros de colmillo durante más de 15 kilómetros
Esta es la distancia que tuvieron que recorrer el domingo dos cazadores catalanes para auxiliar a los perros de caza que se enfrentaban a las peligrosas defensas de un jabalí macho.
La colla de Suria, compuesta por diez socios, gestiona las más de 400 hectáreas del coto El Sevillano. Esta temporada han abatido más de 40 cochinos, alguno de ellos con un trofeo sobresaliente como este.
Los perros de los cazadores pugnaron durante más de dos horas con el jabalí
Los integrantes de esta cuadrilla de amigos de la localidad de Suria, municipio de la comarca del Bages, en la provincia de Barcelona, organizaron el pasado domingo una cacería en el acotado que gestionan. El resultado final de la jornada de caza fue de tres cochinos capturados. Entre ellos destaca un macho de 80 kilos de peso armado con unos colmillos que sobresalían de sus mandíbulas inferiores 10 centímetros. El macareno fue levantado de su encame por los podencos, brunos de jura y los sabuesos anglo-franceses de Juan Pérez.
El macareno fue levantado de su encame por los podencos, brunos de jura y los sabuesos anglo-franceses de Juan Pérez. A la derecha, el resultado final de la jornada de caza fue de tres cochinos capturados. Entre ellos destaca un macho de 80 kilos y gran trofeo.
Los colmillos del peligroso jabalí pusieron en jaque a cazadores y perros
Los perros persiguieron al cochino durante más de 15 kilómetros de distancia con respecto al lugar en el que fue descubierto por los canes. En este espacio, el macho les plantó cara en varias ocasiones. Francisco, hermano del perrero, y Juan siguieron de cerca esta persecución para tratar de salvaguardar la integridad de sus compañeros de cuatro patas.
Gracias a las indicaciones de los collares GPS que portaban los perros pudieron llegar al escenario en el que se producía una cruenta batalla. Francisco logró derribar al aguerrido macho tras un certero disparo de su rifle Remington del calibre .30-06. Se trata del ejemplar de mejor trofeo, no el de mayor tamaño, que han abatido los cazadores en el lustro que llevan gestionando esta finca. Recuerdan el impresionante ejemplar que abatieron no hace mucho y que pesó 130 kilos.
Este es Francisco junto a otro gran cochino de 130 kilos cazado en una temporada anterior. A la derecha, 80 kilos pesó el jabalí de largos colmillos.
Javier Fernández
