Caza de anátidas con halcones peregrinos: el picado más veloz de la naturaleza
El halcón peregrino es el ave más veloz de la tierra. Estas espectaculares imágenes grabadas por un cetrero español muestran que no tiene rival en la naturaleza.
En función de la subespecie de halcón, varían los pesos en caza. Los halcones nórdicos cazan con un mayor peso que los ibéricos. Sirva de ejemplo las hembras danesas de Juan García Solís, que cazan con un peso aproximado de 1 kilo, mientras que los machos de la misma subespecie cazan con 660 gramos. Un ánade real macho pesa aproximadamente un kilo, y una cerceta, 500 gramos.
389 km/h es la mayor velocidad registrada en vuelo de un halcón
Esta medición fue realizada por el paracaidista profesional de caída libre Ken Franklin en 2005, usando un halcón amaestrado para picar junto a él. Un cetrero, criador de halcones y propietario de una empresa de fauna, publica en su cuenta de Instagram alguno de los lances de sus halcones. Las aves rapaces con unos vertiginosos picados a velocidades cercanas a los 200 km/h acuchillan a cercetas y ánades reales cuando tratan de escapar al ser sorprendidos en arroyos y lagunas.
Cómo cazan los halcones peregrinos
Nuestro colaborador habitual y experto halconero, Juan García, nos explica el comportamiento de los halcones cuando tratan de cazar una pieza. Tras alzar el vuelo desde su atalaya, realizan el denominado vuelo de vela. El ave rapaz describe círculos aprovechando las corrientes térmicas o de aire, hasta situarse a una altura desde la que inicia el vuelo hasta sus zonas de caza. A este tipo de vuelo se le conoce como de crucero.
En el momento que detecta una pieza, mientras el halcón iba describiendo círculos, y decide tratar de cazarla el ave inicia el vuelo de caza, comúnmente conocido como picado. La rapaz acaba con la vida de su presa cortando la médula espinal o aplastando la cabeza del pájaro con su garra trasera y su afilado pico. En el caso de impactar en la cabeza, la muerte es instantánea.