Un pastor salva a un cabrito recién nacido haciéndole el boca a boca
Málaga

Un pastor salva a un cabrito recién nacido haciéndole el boca a boca

El ganadero malagueño no se limitó a reanimar al choto, también evitó la muerte de la madre al auxiliarla durante el parto. La cría ha sido bautizada con el nombre de Azai, término hebreo que significa fuerza. Te contamos los detalles y te mostramos cómo el pastor salva la vida de ambos animales.


No es la primera ocasión en la que el cabrero ha necesitado hacerle el boca a boca a uno de sus animales para salvarle la vida. En julio del año 2021 encontró al llegar a la explotación una cabra casi muerta. Otro ejemplar, accidentalmente, había introducido uno de sus cuernos dentro del hueco entre su collar y su cuello, y la había asfixiado.

Para los ganaderos no existen domingos ni festivos

El domingo por la mañana Jorge Bandera, un ganadero de Casarabonela, municipio de la provincia de Málaga, se percató de que una de sus cabras de la raza malagueña, raza caprina española originaria de la provincia de Málaga, se encontraba en serias dificultades. Inmediatamente abandonó la tarea que estaba realizando, estaba soldando en la nave en la que se encuentran sus reses, para ayudar al animal.

El pastor necesitó más de 20 minutos para sacar al cabrito del interior de su madre

Esperanza, una cabra con 14 meses, no era capaz por si misma de parir al choto. Jorge gracias a su experiencia durante más de una década con el ganado sabía cómo evitar la muerte de la cría y la cabra. Hace siete años invirtió todos los ahorros de su vida para tener su propia explotación ganadera. Después de 20 minutos de grandes esfuerzos, consiguió sacar al cabrito. El animal no respiraba.

 

El ganadero logra reanimar al choto

Durante más de 5 minutos Jorge estuvo reanimando a la cría. Necesitó insuflarle aire en varias ocasiones para lograr que su corazón volviera a latir y respirara por sí misma. La perseverancia del malagueño dio sus frutos y logró devolver a la vida al cabrito. El animal, nacido de Esperanza, es un macho. El pastor ha decidido que en un futuro sea uno de los sementales de la ganadería.

 


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