Un guarda rural desmiente al colectivo animalista tras intentar cerrar el coto de caza que gestiona

Según las declaraciones de la portavoz del colectivo en defensa de los animales a la Opinión de Málaga," los ecologistas entienden que es un peligro para todos, porque vienes aquí a pasear y te pueden dar un tiro", cuando la zona cercana a las edificaciones está destinada al adiestramiento de perros sin armas de fuego y a zona de reserva, según el guarda rural.

El guarda rural se encarga de proveer de agua a todos los animales del coto.

El coto de caza, con más de siglo de existencia, es un ejemplo de gestión medioambiental

Víctor Villalobos, guarda rural y técnico de Medio Ambiente, responde a las acusaciones de los animalistas vertidas en el medio de comunicación La Opinión de Málaga. El guarda rural trabaja para la Sociedad de Caza Las Canteras Churriana desde hace tres años.

"Acudo a Club de Caza y a otros periódicos locales para responder a las declaraciones de la Asociación de Ecologistas Ciriana e informar al delegado de Medio Ambiente, José Antonio Víquez, y a José del Río, concejal de Churriana, de los hechos denunciados, ya que en ningún momento se han puesto en contacto con nosotros. Estamos totalmente a su disposición para cualquier duda, sugerencia o consulta.

En el artículo de la Opinión de Málaga del día 16 de enero, firmado el periodista Alfonso Vázquez, la Asociación de Ecologistas Ciriana denuncia presuntas irregularidades en la Sierra de Churriana. Como ecologistas que somos y amantes de la naturaleza felicitamos al colectivo por el trabajo realizado. Cualquier irregularidad que pongan en conocimiento de la administración que sea beneficiosa para el medio ambiente será celebrada por nosotros".

Gestión realizada en el acotado en favor de todos los animales que lo pueblan.

"Si los animalistas logran su objetivo, ¿financiarán ellos los cuidados de los terrenos del acotado?"

"En relación al veterano coto de caza que ha sido referenciado en el artículo, tengo que decir que como ellos mismos indican el acotado fue constituido antes que las viviendas y jamás ha habido ningún tipo de problema de convivencia con los vecinos, más bien todo lo contrario. El coto se divide en tres zonas, una reserva donde la señalización prohíbe la caza, una parte destinada al adiestramiento o campeo de perros donde los canes de una manera controlada cazan en la modalidad de a diente y otra zona de caza con armas de fuego. Todos los socios de la sociedad respetan escrupulosamente las distancias mínimas exigidas por la legislación vigente a edificios aislados, ganado, áreas recreativas y lugares donde se produzcan concentraciones de personas mientras duren tales circunstancias.

Todo ello regulado por los agentes medioambientales a través de los planes técnicos de caza, que son instrumentos de gestión de los terrenos cinegéticos que garantizan el aprovechamiento sostenible de las especies cazables de Andalucía.

A partir de los planes técnicos de caza se establecen los criterios de gestión cinegética, debiendo incluir, entre otros datos, el inventario de poblaciones silvestres existentes, la estimación de extracciones o capturas a realizar y la delimitación de una zona de reserva para permitir el refugio y desarrollo de las poblaciones en las que no podrá practicarse la caza ni cualquier otra actividad que afecte negativamente a aquellas. Gracias al servicio de Guardería Rural, pagado íntegramente por los cazadores, se han llevado acabo infinidad de actividades en beneficio de la flora y la fauna del coto.

Entre las labores realizadas por guardas y cazadores, se encuentran la extinción de incendios, prevención del fuego, retirada y limpieza de escombros, denuncias de vertidos, identificación de furtivos, señalización de pozos peligrosos, rescate de animales o la búsqueda de personas entre otras acciones. Puedo corroborar estos hechos con nuestra colaboración con SEPRONA, los agentes medioambientales de la Junta de Andalucía y la Policía Local de Málaga".