Apasionante lance ante un rapidísimo jabalí
Es el propio cazador el que nos cuenta cómo vivió este trepidante lance en el que consiguió abatir un buen jabalí que pasó veloz por delante de su postura.
El lance tuvo lugar en el Coto de Peñamellera Alta (oriente de Asturias), protagonizado por David Fernández, responsable de la página de Instagra, Batidas Jabalí, durante una cacería de jabalí. Así lo narra el cazador:
“Al poco de comenzar la batida, había llegado hasta mi postura un cachorro que me estuvo acompañando durante buena parte de la mañana. Cada vez que lo soltaba, volvía donde estaba yo y si lo dejaba atado a un árbol se ponía a ladrar. Finalmente opté por avanzar con él hasta la mata que tenía frente a mí y conseguí meterle de nuevo a la cacería.
Un rápido jabalí irrumpe en escena
Volví al puesto y no habían pasado 30 segundos cuando siento romper en el mismo punto en el que perdí de vista al cachorro. "Ya está aquí de nuevo el perro", pensé. Así que no presté demasiada atención al ruido, y la inconfundible silueta negra de un buen jabalí que se deslizaba entre los árboles me cogió algo desprevenido. El jabalí bajaba ligero, seguramente espantado por haberse tropezado en su huida con el cachorro.
Eché el rifle a la cara, un Sauer 202 en calibre 7mm RM, y esperé el momento idóneo para jugar el lance. Cuando creía tener al jabalí metido en el punto rojo, apreté el gatillo. ¡No puede ser, le he fallado! Pero en realidad con el primer tiro le partí una pata trasera. El jabalí hizo un extraño y apretó todavía más el paso. Tirar de cerrojo y volver a apuntar para jugar un último intento fue todo uno”.
Precioso jabalí con peligrosos colmillos el abatido por David. A la derecha, Toñín, valiente montero que remató al jabalí, junto a David, el cazador del navajero.
Un segundo disparo certero que frena la carrera del macareno
“Esta vez sí, conseguí alcanzarle, en un tiro algo trasero y que le entró de arriba a abajo, frenando su huida. El jabalí chilló y yo le di prácticamente por muerto. Pero con estos animales nunca te puedes fiar y el navajero, sacando sus últimas fuerzas, logró introducirse en un bardal que tenía debajo.
Durante unos momentos de tensión fuimos frenando a los perros que venían tras el jabalí, para impedir que resultasen heridos, y esperamos la llegada del montero Toñín Soberón, valiente donde los haya, quien tuvo el arrojo necesario para introducirse en el bardal y rematar al jabalí”.
