La becada con el pico corto, una rareza de la naturaleza
El pico de las becadas suele medir entre 6,8 y 8 centímetros. Es una longitud considerable en un ave limícola de un tamaño de 35 centímetros. Pero existen ejemplares muy extraños cuyos picos no superan los 35 milímetros. Son las denominadas becadas brevirostre.
Las aves limícolas están generalmente asociadas a entornos húmedos. Limus, del latín, significa ‘lodo’, lo cual nos aclara el entorno en el que estas aves se alimentan. Pero la becada, a pesar de compartir muchos hábitos con la mayoría de este grupo, elige los bosques y prados colindantes en lugar de las costas, estuarios y lagunas para alimentarse.
Y, para ello, acuden a su largo pico, que le sirve para introducirlo en los suelos ablandados por la humedad y buscar allí todo tipo de invertebrados ocultos en las primeras capas de la tierra o entre la hojarasca. Scolopax, su primer nombre en latín, se traduce como ‘palo’ o ‘estaca puntiaguda’, haciendo clara referencia a su pico. Esos 8 centímetros la ayudan a alcanzar lombrices y otros pequeños invertebrados.
Imagen publicada por los cazadores franceses con la becada del pico de solo 33 milímetros.
La becada brevirostre
Pero en extraordinarias ocasiones, es descubierta algún ejemplar que ha sido castigado por caprichos de la genética con un pico anormalmente corto. Aquí, los expertos acuden al término brevirostre o brevirostro para definir la anormalmente corta longitud de ese pico, aunque es un término que se aplica a multitud de especies por la misma razón, como son los crocodilianos de hocico corto (aligátor americano, por ejemplo), y algunas especies de peces.
Es lo que han documentado hace pocas semanas cazadores de Ille-el-Vilaine, que capturaron una joven becada con un pico de tan solo 33 milímetros, es decir, de poco más de un tercio de su medida normal. Los mismos cazadores confirman que los picos de menos de 50 milímetros ya pueden considerarse anómalos y se catalogan como brevirostro.
Comparación de una becada de pico normal y otra brevirostre de solo 45 milímetros de longitud cazada en Rignac, Francia, en 2019. Foto: Chasse-nature-occitanie
¿Qué causa que estas becadas tengan picos cortos?
Se han documentado casos más extremos con picos de 26 y 28 milímetros en Finistere (Francia) y Bélgica. La razón de esta anomalía no ha sido investigada científicamente, pero los aficionados franceses apuntan a dos posibles causas: mutación genética o resultado de envenenamiento por pesticidas o metales pesados.
