Así impone el poder de sus garras un águila a un lobo que se acerca demasiado
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Así impone el poder de sus garras un águila a un lobo que se acerca demasiado

La jerarquía natural entre depredadores es algo que ha aprendido este lobo al tratar de enfrentarse a una gran águila y a sus poderosas garras.


Cuando un depredador da caza a una presa o encuentra un cuerpo sin vida abandonado, lo aprovecha en una gran oportunidad de conseguir alimento sin gastar energía en ello. Pero en la vida salvaje, la lucha entre competidores le llevará a este lobo a aprender por las malas quién está por encima en la pirámide jerárquica.

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Fotograma del vídeo en el que vemos cómo se imponen las poderosas garras del águila al atrevido lobo.

El hambre enfrenta a dos especies de depredadores

El hambre lleva al cánido a intentar arrebatarle la presa a la gran águila. Expertos cetreros consultados por Club de Caza se aventuran, a pesar de la escasa calidad del vídeo y su brevedad, a sostener que se trata de un águila imperial oriental (Aquila heliaca). Se trata de un ave distribuida por Europa del este y gran parte de Asia, desde donde migra al sureste del continente asiático y África oriental en los meses más fríos.

 

Una poderosa águila

Sus 80 centímetros de longitud desde el pico a la cola y dos metros de envergadura alar y un peso de hasta 4,5 kilos en las hembras, algo similar a nuestra águila real, le permiten hacer frente a los depredadores de mayor tamaño, como vemos en el vídeo.

Su plumaje es marrón excepto en los hombros, donde observamos unas manchas blancas, en la punta de la cola, que es negra, y en la nuca, que cuenta con tonos pardos claros o dorados. Se alimenta de ardillas, roedores, mustélidos o presas de mayor tamaño, como el zorro o todo tipo de aves.

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