Terrible accidente de caza: un disparo accidental a tres metros y un guarda herido
Club de Caza ha hablado con el padre del Guarda de Caza herido, que se encuentra al lado de su hijo, en el hospital tras haber sido intervenido de urgencia. Se encuentra fuera de peligro.
Ayer se produjo un desgraciado accidente de caza cuando una escopeta se disparó muy cerca de un Guarda de Caza que estaba desempeñando su trabajo. Hemos hablado con el padre del herido, que nos tranquiliza confirmando que su hijo fue operado con éxito y se encuentra fuera de peligro.
Un disparo accidental a solo tres metros de distancia
El Guarda de Caza se aproximaba a uno de los miembros de la Sociedad de Cazadores de Olivares, en Sevilla. Su intención era comprobar la documentación del mismo y el número de zorzales abatidos, como nos confirma Luis, el padre del herido.
Pero el cazador no se percata de la presencia del profesional, siempre según la versión que el guarda ha contado a su padre, y, en el momento en que está a solo tres metros de distancia, el cazador va a intentar acometer el lance a un zorzal y la escopeta se dispara cuando iba a encararla. Los plomos impactan de lleno en su abdomen y zona pectoral.
La ropa de abrigo y el cinturón con la hebilla de Guarda le salvan la vida
El día comenzaba frío ayer en Olivares, municipio de la provincia de Sevilla que podemos encontrar en la comarca del Aljarafe, a orillas del río Agrio, afluente del río Guadiamar. Por esto, el Guarda, de nombre Gustavo, llevaba ropa de abrigo sobre su uniforme. Cuando los plomos del cartucho de 28 gramos y perdigón fino impactaron en su ropa, esto restó penetración a los proyectiles, a pesar de que las heridas fueron muy graves, tanto en su pecho como en su abdomen.
El taco entró en la zona abdominal, pero el cinturón oficial de Guarda de Caza le ha salvado la vida al absorber parte de su impacto. La hebilla ha quedado prácticamente disuelta tras el impacto.
Fue trasladado de urgencia en helicóptero al hospital, donde fue intervenido de urgencia en los músculos abdominales y para retirar los plomos y la parte del taco que no frenó la parte metálica del cinturón. Según los médicos que le operaron, los plomos no habían alcaznado órganos vitales.
Fuera de peligro
Gustavo se encuentra en observación y fuera de peligro, recuperándose junto a su padre, que también fue Guarda de Rural de profesión, estableciendo una dinastía dedicada a la guardería, ya que dos hermanos del herido son también Guardas de Caza.
Luis ha querido destacar el estado de preocupación que ha mostrado el cazador desde el primer momento, muy afligido por lo sucedido.
