Proponen el uso de las poblaciones de cernícalos para controlar las plagas de topillos
Un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha estudiado durante once años las relaciones de dependencia entre un depredador generalista, el cernícalo común (Falco tinnunculus), y algunas de las especies que le sirven como presas, como el topillo campesino (Microtus arvalis), el lagarto ocelado (Lacerta lepida) y la musaraña gris (Crocidura russula).
Hay más topillos cuando el año previo hubo menos cernícalos, más precipitaciones y la temperatura media anual fue más alta
Las dinámicas de topillos, musarañas y lagartos
La dinámica poblacional del topillo se explica por el número de cernícalos y por las condiciones climatológicas. Hay más topillos cuando el año anterior hubo menos cernícalos, cuando la temperatura media anual fue más alta y la precipitación anual mayor. En el caso de las musarañas, su población se incrementó con un descenso en la cantidad de cernícalos y un aumento de las temperaturas. Y respecto a los lagartos, tan sólo afectó la variable de la precipitación durante el verano del año anterior; se incrementó su población cuando hubo una mayor precipitación durante el mes de agosto del año previo. «Por otra parte, se podría prevenir, además, el uso de veneno como plaguicida que causa la muerte indiscriminada de otras especies, perjudica el estado de conservación de las poblaciones de fauna salvaje y afecta también a otras actividades económicas, como la caza», añade Fargallo. Según los autores del estudio, la mayoría de los trabajos que analizan la dinámica depredador-presa en vertebrados están basados sobre todo en sistemas nórdicos o semidesérticos más simples, donde los depredadores suelen ser especialistas (sólo una o pocas especies le sirven como presa). Estos sistemas facilitarían el análisis y la comprensión de las dinámicas poblacionales. En el área mediterránea, no obstante, los sistemas son más complejos, la biodiversidad es mayor y, al igual que en los semidesérticos, las condiciones climatológicas «influyen de forma decisiva» en las dinámicas de población de los animales, según exponen los investigadores. Para Fargallo, «aún no se conoce muy bien cómo las fluctuaciones poblacionales de las especies-presa pueden afectar a la abundancia de depredadores con un amplio espectro trófico o generalistas».