Acompañamos a investigadores que están anillando codornices en Castilla y León
«No hay menos codornices en España, solo han cambiado de hábitos», nos cuenta uno de los investigadores que más horas pasa en el campo estudiando y anillando ejemplares de la especie.
Los cazadores son el único colectivo que de manera eficaz está trabajando por conocer los hábitos y las rutas migratorias de las codornices. El proyecto "Coturnix" es un ejemplo de ello. Cazadores trabajan por la especie los 365 días del año realizando tareas de anillamiento de aves y mejorando los hábitats.
El proyecto "Coturnix", impulsado por Mutuasport con la colaboración de Fundación Artemisan, RFEC y las federaciones autonómicas de caza ha sido vital para impedir la intención del gobierno de España de declarar la codorniz especie en peligro de extinción y así justificar la prohibición de su caza.
Proyecto ‘Coturnix’
El estudio surge para evaluar el estado de conservación de la codorniz en España. Este proyecto se ha convertido en un factor de gran importancia para avanzar en la investigación sobre la especie, algo que beneficiará aspectos como su gestión y la caza sostenible de sus poblaciones. Asimismo, pretende profundizar en aspectos de su biología y ecología. Una de las partes fundamentales de este proyecto consiste en el anillamiento de las aves y la posterior recepción de estás anillas una vez abatidas las codornices por los cazadores.
La información recibida permite a los investigadores estudiar las rutas de migración que siguen las aves, la sincronía de la migración junto con las variables ambientales, los efectos del calentamiento del clima sobre tal migración y la fenología de la codorniz ya que solo conociendo bien la especie será posible su caza de una manera sostenible.
Anillamiento de codornices en Castilla y León
José Antonio Pérez, veterinario especializado en especies cinegéticas, es el encargado de las tareas de anillamiento de las codornices en Castilla y León. El cazador ostenta el cargo de dinamizador del proyecto "Coturnix" en la comunidad autónoma. José Antonio es licenciado en Veterinaria, Doctor por la Universidad de León y Premio Extraordinario de Doctorado con la Tesis Doctoral “Determinación de los principales parámetros ecoetológicos de la perdiz roja (Alectoris rufa) y su aplicación a la evaluación de animales destinados a repoblación”, Máster Internacional en Gestión y Conservación de la Fauna Salvaje Euromediterránea, técnico acreditado para la realización de estudios de Evaluación de Impacto Ambiental y Auditorías Ambientales y Estudios de Ordenación Cinegética por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León y presidente del Club de Cazadores de Becada de España.
A lo largo de su carrera, ha obtenido el Premio Venatorio a la Juventud Ricardo Medem de la Real Federación Española de Caza en su V edición (año 2006) por los estudios realizados sobre gestión y conservación de especies de fauna silvestre.
El cazador, junto a otros compañeros, goza de autorización para realizar tareas de anillamiento todo el año. Según José Antonio, la época en la que se producen un mayor número de anillamientos es primavera y verano. En este inicio de temporada ha logrado anillar 29 ejemplares.
No hay menos codornices en España
Preguntamos al cazador e investigador cómo se encuentra el estado de la población de codornices en España
"No hay menos codornices, únicamente ha habido un cambio de hábitos debido a las modificaciones del hábitat. En primer lugar, recalcar que hablamos de reducción de la codorniz en España por la disminución de los resultados de caza en aproximadamente un 35%, pero los estudios con la especie sugieren que en realidad el descenso de datos de caza quizá no refleje una reducción de sus efectivos poblacionales globales, sino un cambio en sus usos del hábitat y comportamiento migratorio postcría, especialmente en España (Rodríguez-Teijeiro y cols, 2012).
Por otro lado, decir que se lleva mucho tiempo anillando codornices en España, y por diferentes entidades. Desde la Real Federación Española de Caza a través, de su extinta fundación FEDENCA, se anillaron 16.338 machos entre 2002 y 2011, por ejemplo. Es cierto que con la generalización en la utilización de internet y las redes sociales es más fácil llegar a los cazadores y que, por tanto, estén al corriente de estos trabajos como que puedan colaborar fácilmente en la notificación de las anillas recuperadas.
Esto es fundamental para recabar información muy valiosa de los movimientos, supervivencia o preferencias de esas codornices anilladas, información que antes era más difícil de obtener. Finalmente, decir que mucha gente se interesa por poder anillar, pero que, pareciendo algo sencillo, es más complejo de lo que parece.
Resumiendo, en primer lugar, el anillamiento científico está sometido a una normativa específica gestionada en España por la Oficina de Anillamiento, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente a través de la cual existen unas pocas entidades autorizadas para avalar a los anilladores que realizarán el trabajo de campo.
En segundo lugar, los anilladores han de tener una formación adecuada sobre el manejo del ave, recogida de datos biométricos e interpretación de la edad por la muda de su plumaje, así como grabación de los mismos según unos estándares científicos que den validez a todo el proceso.
En tercer lugar, para anillar ha de formarse parte de un proyecto de investigación que marque unos protocolos de trabajo a cumplir, es decir, supone un esfuerzo que tiene que ajustarse a unos mínimos de repeticiones en las jornadas de anillamiento, no se trata de "echarse al monte" a anillar cuando a uno le apetezca.
Además, con los objetivos y desarrollo de un proyecto como el Coturnix, el esfuerzo e inversión en tiempo y desplazamientos que supone el anillamiento no siempre justifica su rédito de información obtenida al nivel de otras actuaciones como censos, encuestas de jornadas de caza o toma de muestras de codornices cazadas, mucho más importantes en este momento. Por tanto, juega un papel menor que no puede ir a más mientras no haya mayor inversión de capital para su desarrollo".