Francia

Caza de jabalíes con perros de rastro

Una rehala de perros de la raza Bloodhound sorprende a una piara de jabalíes que se ha refugiado en una zarzal próximo a la alambrada que delimita una de las parcelas de la mancha en la que se estaba desarrollando la cacería.


  Caza de jabalíes con perros de rastro
Caza de jabalíes con perros de rastro

Los cochinos pretendían pasar desapercibidos en su lugar de ocultación. Lo que no contaban es con el portentoso olfato de la raza de perros que componen la rehala de los cazadores franceses que rodean el mato.

El olfato de los perros de rastro frente a la astucia de una piara de jabalíes

El vídeo ha sido publicado por una página francesa especializada en esta raza de perros de nombre Elevage du bois de bretel. En una cacería desarrollada en tierras galas a finales de diciembre una rehala de perros de la raza Sabueso de San Huberto, raza canina originaria de Bélgica, más concretamente de la región de las Ardenas, detecta la presencia de una piara de jabalíes en el interior de un zarzal. Los sabuesos se enfrentan con el grupo de cochinos hasta que finalmente logran que uno de los ejemplares salte al claro. La mayoría de los canes de la rehala persiguen al suido. Esta circunstancia es aprovechada por el resto de integrantes de la piara para huir por el lado opuesto del zarzal. Los cochinos se valen del desconcierto que se ha producido entre rehaleros y perros con la irrupción del primero de los cochinos para escapar sin ser acosados por los perros.

El Bloodhound es de una de las distintas razas de sabueso reconocidas por la FCI en su grupo 6. Es uno de los perros con el olfato más agudo. Se ha documentado que son capaces de seguir un rastro de hasta quince días. Los canes de esta raza están dotados de una enorme sensibilidad en su nariz, causada por los pliegues internos de sus fosas nasales.

Un zarzal, 15 jabalíes y una cacería para el control de daños a la agricultura

Una cuadrilla de cazadores granadinos abatió durante una cacería por control de daños a la agricultura los 15 jabalíes que se refugiaban en el interior de un zarzal. Gracias al formidable trabajo de la cuadrilla de podencos de los cazadores uno tras otro fueron saliendo del zarzal los cochinos que se encontraban en el matorral. José Antonio Rodríguez, uno de los cazadores del grupo, fue el encargado de narrar para Club de Caza el espectacular momento de caza.

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