Las Administraciones masacran a los fringílidos

En esta ocasión no voy a irme por las ramas y sólo voy a referirme a la matanza no cuantificada de los fringílidos en España cuya captura ha sido ahora prohibida en varias autonomías sin que la citada prohibición tenga alguna razón.


Estamos ante un complejo mundo donde las competencias son autonómicas y que en el que en el Estado está considerado como MODALIDAD DEPORTIVA denominada SILVESTRISMO al amparo de una Real Federación Española de Caza (RFEC), dividida además de otras asociaciones atomizadas que propician una prohibición indebida como consecuencia de mendaces informes catastrofistas de los ecologistas sin la debida contrapartida por parte de los cazadores. Informes cínicos y truculentos que, no contentos con hacerlos llegar al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), los llevan a Bruselas con lamentos torticeros de viejas e indecentes plañideras subvencionadas por un Estado que desconoce la materia sobre la que legisla. Pues, como escribía antes, las competencias son autonómicas, la coordinación no es vinculante y carecemos de una ley marco.

Les hipervínculo al INFORME JURÍDICO SOBRE EL SILVESTRISMO, EN ESPECIAL, EN LA COMUNIDAD DE MADRID. Un informe jurídico que no es baladí. Y también es digno de mención el esfuerzo que está haciendo la Oficina Nacional de la Caza (ONC) y el MAGRAMA.

Voy a ir directamente a la verdad, mi verdad comprobada, descarnada, fotografiada y avalada por varias noticias al respecto que incluso hipervinculado a lo que dice el Estado y alguna autonomía, como por ejemplo: ANDALUCIA.

Andalucía plantó cara a los de siempre y les ganó destapando, de paso, lo que todos sabemos.

Es cierto que la caza necesita una nueva reorientación, pero la ornitología de España la necesita mayor.

Lo de los fringílidos en Andalucía es largo de explicar y cualquiera lo puede buscar a través de Google en Internet. Y eso es lo que hay que hacer, dejar de quejarnos y canalizar nuestras afrentas a través de la Justicia aportándo informes técnicos que vayan más allá de los que hacen estos especialistas rancios del papel cuché y las fotografías bonitas que nos han abocado a meternos en el laberinto que estamos. Estos sujetos están amortizados y nos han fallado tal y como lo estamos sufriendo. Y encima, hay que aguantarles sus prédicas parvularias sin bajarse del púlpito. Oigan, que ustedes nos han fallado y han sido bien pagados. Sí. Y encima nos han traicionado poniendo una vela a Dios y otra al diablo. Y pensar que todavía hay en nuestras filas quien les contrata debido al buen rollo que tienen con los ecologistas. Es de vergüenza torera.

La masacre de fringílidos sistematizada y por todos silenciada, pero no ignorada

  • En los campos cerealistas de España crían los fringílidos en los espinos albares y en especies leñosas similares. Pues bien. Sistemáticamente se arrancan y queman esas sempiternas querencias sin que nadie diga absolutamente nada.
  • En los árboles frutales, y muy en especial en las fincas de manzanos aisladas o en los huertos, crían de manera más que segura los jilgueros. ¿No? Pues bien, estos criaderos naturales se fumigan sin miramiento alguno en cualquier época del año sin importarle a nadie si los fringílidos están criando o emigrando.
  • En las viñas de toda España criaban los pardillos, tanto estuvieran plantadas en copa como en espaldera. ¿No es así? Pues bien, para evitar mano de obra, toda la vid de España (salvo excepciones minoritarias) se está replantando con espalderas donde: el deshije (quitar pámpanos), los múltiples y casi continuos fumigados así como la vendimia y la podadera se están llevando a cabo con máquinas especiales para tales menesteres.
  • Para erradicar urracas, ahora que ya se han refugiado en pueblos grandes y ciudades, autorizan descastes. Pero no se llevan a cabo descastes o desubicaciones de los depredadores protegidos en ninguna parte ya que siempre, a juicio de los defensores subvencionados, parecen pocos. Dado que los fringílidos en general también han tenido que refugiarse en las ciudades, sus nidos se convierten en comida fácil de, por ejemplo, las urracas.
  • Tanto en las ciudades como en la mayor parte de los pueblos de España se fumigan con venenos letales los árboles y matorrales de las vías públicas.
  • En los cotos se hacen planes de gestión obligatorios que cuestan un cojón y al olor de esta sardina se han creado una serie de sociedades que se camuflan como defensoras de los cazadores. ¿Hay alguna donde en esos planes de aprovechamiento, y su posterior seguimiento anual, se tenga en cuenta a los fringílidos? No. Y lo que es peor, ¿dónde y cómo se pueden comprobar las directrices técnicas para la adaptación de la extracción de fringílidos del medio natural al artículo 9 de la Directiva Aves 2009/147/CE. ¿Las aves ubicadas en las ciudades no se tienen en cuenta para cupos y temas similares?…
  • Ave que no se refugia en las ciudades, ave que cae en un declive imparable cuya evidencia es palpable y cuyas quejas sólo provienen de los cazadores. Si yo les escribiera del bajón que están pegando los aláudidos en el campo se quedarían a cuadros, pero esos —como no se cazan— no parecen interesar a nadie.
  • ¿A santo de qué no se gestiona la fauna de pueblos y ciudades? Yo conozco varias donde por los árboles y jardines de calles y rotondas crían los verderones, verdecillos y hasta los jilgueros. Pues bien. En los parques y en los barrios periféricos de las ciudades hay urracas a montones donde nadie las ha nivelado y no han dejado ni un fringílido. Es más, veo la tenacidad de los policías municipales en denunciar hasta al Lucero del Alba y un servidor de ustedes, que soy yo, ha visto a un sujeto llevarse un nido con pájaros y todo como quien se toma un refresco en una terraza. ¡Probos y competentes munícipes, ustedes que enseñaron a su guardia pretoriana que cortar una rosa de los jardines capitalinos es sancionable, explíquenles que lo de llevarse la biodiversidad en forma de fringílidos es mucho más reprobable!
  • Las carreteras de España están bordeadas por árboles y matorrales autóctonos y alóctonos colocados al albur de los capataces de obra o de un etéreo proyecto de jardinería posterior a la obra en sí. Pero la maleza autóctona subyacente se resiste a sucumbir ante tamaños desatinos. En el caso de las autopistas tenemos unos adornos vegetales que en muchos casos son un monumento al mal gusto. Pero todos ellos hay que podarlos o limitarlos el crecimiento a través de un mantenimiento no reglado que se hace en casi todas las provincias de España mediante el cancerígeno Glifosato. Tanto la poda como el suministro de Glifosato se hacen a la luz del día y los desbroces se llevan a cabo mediante tronzadoras mecánicas soportadas manualmente o adheridas a tractores. Yo lo he visto tanto en las autopistas como en las demás vías de comunicación de toda España podar o desbrozar en cualquier época del año e incluso en periodos de cría de todas las especies. ¿Quién mata a los fringílidos? Pero señores míos, si las capturas de los cazadores son pírricas y los que no valen se sueltan con luz y taquígrafos, que diga: delante de todo aquel que quiera deleitarse viendo volar a tan preciosas aves.
  • Yo, que paso muchas horas en mi puesto de pasa de torcaces, observo con deleite la cantidad de bandos de fringílidos que vienen a pasar el invierno a España y luego los vuelvo a ver y fotografiar por los cardenchales de toda La Rioja. No obstante, sé a ciencia cierta que tienen muchos más depredadores (protegidos y sin proteger) que los que puede soportar el contingente. Pero de esos depredadores escribiré otro día.
  • Observo en algunos parques que hay más ardillas de las que puede soportar el medio y parece que nadie se da cuenta de que tan precioso animal es un comedor insaciable de huevos de todas las aves.
  • Los bebederos de verano dan cuenta y razón de que las diferentes especies de fringílidos están en expansión dentro de las poblaciones humanas y me gusta fotografiarlos o contemplar sus evoluciones bañándose con deleite inusitado.
  • Lo de la cría de fringílidos en cautividad para suplir las capturas me parece, cuando menos, fuera de lugar y no lo quiero criticar como lo estoy pensando por respeto a FEDENCA, cuya paralización por líos de poltronas en la RFEC está repercutiendo negativamente en la Venatoria Española. Qué gente. Estos, el día menos pensado inventan un “CRIADERO DE COCODRILOS DE BOLSILLO”. Pero en el caso que nos ocupa, FEDENCA está de acuerdo con la captura de fringílidos.
  • La fotografía, mi nueva afición tomada en serio después de mi jubilación, me está reportando muchos conocimientos. Luego, al irlos a contrastar con los libros de los ornitólogos oficiales que avala y paga el MAGRAMA, me encuentro con que niegan u omiten lo que un servidor ha visto con sus propios ojos y ha fotografiado con sus cámaras. Por eso no me arrepiento de las horas de hide público que meto pagando o yendo a los que no se requiere ningún privilegio, mientras otros, so pretexto de anillamientos y similares, tienen bula para hacer fotografías desde lugares privilegiados para luego vender las imágenes hasta al propio Estado que lo permite. Por el momento, estoy recopilando, fotografiando y documentado casos y cosas que a más de uno dejaran boquiabierto.
  • Hay una gran mortandad propiciada por los edificios de cristales sin señalizar, así como en los grandes ventanales que, junto a la de los molinos eólicos y cables aéreos de telefonía o electricidad, baten records jamás cuantificados.
  • Las carreteras matan toda serie de especies, llevándose la palma los fringílidos y los aláudidos cuando empiezan a volar.
  • Los alambres de las vallas de las carreteras, de las viñas con espalderas y de los cercones de todo tipo, matan aves a degüello.
Comparte este artículo

Publicidad