Carta de un cazador federado al presidente de la RFEC

Estimado Ángel: Te escribo como cazador federado, uno más, desde mi libertad de expresión y desde mi más absoluta convicción democrática. No tengo nada que ganar, pero tampoco nada que perder. A estas alturas de la vida, con 63 años recién cumplidos, no puedo guardar mis pensamientos y mis sentimientos.


Ayer por la tarde-noche recibí un WhatsApp de Ignacio Valle, presidente de la Federación de Caza de Cantabria, informándome de tu inclusión en las listas del partido político Vox, como candidato a las próximas elecciones europeas. Y me da igual que sea el partido que sea. Cada uno tenemos nuestras ideas personales y políticas.

Con la sorpresa y sin tiempo de pensar, inmediatamente le pregunté: ¿Y quién será el presidente de la RFEC? ¿Tú (Nacho), como vicepresidente? Me respondió que él no, que seguirá como hasta ahora, que tu candidatura no presenta incompatibilidad hasta que salgas elegido. ¡Qué ironía!

Voy a recordar un poco. Te presentaste a la RFEC y ganaste unas elecciones en un momento muy complicado. Casi desaparece acuciada por las deudas y una gestión catastrófica. Contra viento y marea luchaste por conseguir que la normalidad fuera poco a poco restableciéndose. Un gran mérito.

Te conocí en el mes de noviembre en un hotel de Cantabria en una reunión que propició Ignacio Valle, a la que acudimos Nacho Valle, Juan José Alea, Felipe Ortiz, tú y yo. En esa reunión nos pedisteis a Juanjo y a mí que colaborásemos con temas cinófilos con la RFEC. Juanjo dijo que no y yo, que me lo pensaría y que os pondría algunas condiciones de sentido común. No tenía una opinión sobre ti, pero con tus palabras e ideas, me gustaron tus planteamientos.

Al cabo de unos días hablé por teléfono contigo y con Nacho y me comentasteis que había ciertos peajes con federaciones autonómicas y que revisásemos mis condiciones, repito, de sentido común, sobre todo si vas a trabajar sin cobrar absolutamente nada. Y hasta ahí llegamos. ¡Menos mal!

¿Tú me hablaste de peajes? ¿Tú sabes el daño que has causado, con los tuyos al coquetear con la política, a la RFEC?

Ayer, un conocido me envió un enlace al diario La Razón y leí la noticia y la información y tus comentarios. Desafortunados comentarios, desafortunada, muy desafortunada presentación. Dices en el citado diario que «es una realidad que mi responsabilidad con las sociedades de cazadores, los deportistas, los árbitros y los representantes autonómicos ha sido firme». ¡Hasta ahí podíamos llegar! Para eso te presentaste y para eso cobras un sueldo.

Pero donde te equivocas, gravemente, es en el siguiente párrafo: «…todo ciudadano español, independientemente de su cargo, posición social o condición, está en su derecho a ser elector y elegible en la responsabilidad…» ¡No, señor! A nivel personal sí, pero una institución como la RFEC no se puede mezclar con partidos políticos. Una federación no puede quedar encasillada con un partido político. Y no puedes separar la persona de la presidencia.

El daño es enorme. Si continúas en la RFEC y sales elegido, deberás dimitir, y el público, que no es cazador, unirá a la federación con Vox. Y si no sales elegido, la RFEC quedará estigmatizada también con Vox, porque fuiste su candidato. Y eso es muy malo. Te has aprovechado de la institución para tus intereses personales.

El paso primero, por ética, hubiera sido irte de la RFEC y, el segundo, presentarte por la formación que te parezca. No de esta manera. Sigo, cobro mi sueldo de la RFEC y, si voy a Europa, fenomenal y lo dejo. Y si no, continúo. ¡Vaya desfachatez!

Es por ello que te pido tu inmediata DIMISIÓN como mi presidente. Ya ves, ni siquiera lo hago en nombre de todos los cazadores, ¡Dios me libre!

Atentamente
Fermín Mourenza

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