Con 74 años caza un jabalí totalmente albino

Eliseo García es un cazador jubilado con muchos años de experiencia en la caza de la perdiz y la becada. Con los años, se ha ido aficionando a la caza del jabalí en batida, y ahora reconoce que acude al monte con sus compañeros siempre que puede.

Esto sucedió a principios de febrero, como confirma Eliseo a Club de Caza: «Es totalmente albino, rubio inmaculado. No tiene ni una sola mancha oscura en el cuerpo, como otro que cacé hace unos años en una zona cercana, que parecía esos caballos de los indios americanos de las películas. Aquel tenía buena boca, pero era un híbrido.

Lo vi venir

»Lo vi venir. La parada estaba en una zona boscosa, pero con muchos claros. Y este animal se dejaba ver desde lejos gracias a su color. Si no lo hubiera visto venir de lejos y no hubiera comprobado que se trataba del jabalí albino, no hubiera disparado, porque en ocasiones puedes encontrarte un cerdo en el monte que se ha escapado de una granja.

Así fue el lance

»Llevaba muchos perros detrás, más de quince, y por la emisora ya habían avisado que un jabalí blanco había burlado varias paradas sin que le hubieran podido disparar. Además, ya se había hablado antes sobre la existencia en la zona de un jabalí albino. Compañeros cazadores lo habían visto temporadas atrás».

Eliseo nos cuenta el lance en el que pudo abatir de un disparo limpio a este animal: «Llevaba mi rifle HK en calibre 9,3x62. Ese día no había montado mi visor de batidas. Y menos mal, porque el jabalí rompió en una senda a menos de 15 metros de mí. Me dio el tiempo exacto para encararlo, apuntar y disparar.

»Después del disparo no se movió más. La bala entró justo por encima del hombro y lo mató de manera instantánea».

Un gran cazador de pluma y de jabalíes

Para este veterano cazador, que se describe como «un cazador de pluma», este jabalí representa el más extraño que ha cazado, pero en su haber cuenta con varios trofeos medalla de oro, además de jabalíes de gran peso, como el que abatió hace siete temporadas, que alcanzó 130 kilos en la romana.

Nuestra enhorabuena a Eliseo.