50.000 € para cuatro protectoras de A Coruña… para mejorar sus páginas we

En el caso de una de las protectoras, no duda en echar la culpa de los males de los perros abandonados a la caza. Otra, hace publicaciones en sus redes sociales en contra de la actividad cinegética. Todo, ante la polémica de que este tipo de asociaciones protesta por las subvenciones destinadas a la caza, mientras ellas reciben miles de euros.


 Protectoras
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Cuatro protectoras de la provincia de A Coruña reciben 50.000 euros de la Diputación, que especifica que algunos de los fondos están reservados para mejorar las páginas web. Además del dinero público, estas organizaciones también reciben donaciones diarias de particulares.

Subvenciones en 2019

La Diputación de A Coruña concede un total de 48.000 euros a cuatro protectoras de animales. Los fondos provienen del programa de subvenciones destinado a estas entidades y para el año 2019. Ahora, son cuatro los organismos que se benefician.

La mayor partida se la lleva Gatocán, con sede en Coirós (A Coruña). Recibirá un total de 25.000 euros. Esta entidad fue fundada en el año 2006 y en 2010 la Xunta la declaró de utilidad pública, por lo que, anualmente, cuenta con fondos reservados que van a parar directamente a sus arcas.

Además, en sus redes sociales llevan a cabo diversos mecanismos para recolectar dinero. Admiten socios que proporcionan una cantidad de dinero fija al mes, con un mínimo de 7 euros. También aceptan donativos para «el mantenimiento de las instalaciones y el cuidado de los animales, de elevado coste económico». En su Facebook ya destacan su cuenta bancaria y llevan a cabo distintas campañas para conseguir dinero de particulares.

En contra de la caza

La Protectora de Animais do Camiño de Santiago recibe 11.8000 euros. En sus redes sociales, pide donaciones que deben realizarse en un número de cuenta que identifican prioritariamente en todas sus plataformas. También admiten socios, para los que no especifican la cuota que se debe pagar. Actualmente, tienen una campaña de crowdfunding abierta que tiene como meta recolectar 2.000 euros para, según dicen, «adquirir un vehículo apropiado para el traslado de perros abandonados y perdidos que recogemos a lo largo del Camino de Santiago». Hasta el momento, han conseguido más de 600 euros de las donaciones anónimas a través de esta campaña.

En su muro de Facebook podemos encontrar diversas publicaciones contra la caza en noticias nada contrastadas, como la de una condena a un «cazador», como dice el titular y el texto de la historia, donde se le atribuye a un cazador el hecho de disparar con una carabina de aire comprimido sobre un gato en el mes de junio. Cualquiera que se hubiera molestado en contrastar los hechos habría ofrecido una información veraz. En cambio, este tipo de publicaciones consigue lo que persigue: provocar odio y comentarios como el que encontramos en el hilo de esta publicación: «Putos cazadores no hay ni uno bueno».

La asociación Cometa de Narón se lleva más de 5.000 euros. Como las anteriores, recuerda reiteradamente y en sus redes sociales las diversas formas de colaboración con la entidad: aportaciones periódicas de dinero, socios que realizan aportaciones y también trabajan en la protectora como trabajadores. Eso sí, sin cobrar.

Toda la culpa, de la caza, ¿cómo no?

La Protectora Apadán, también de A Coruña y con sede en Culleredo, recibirá 5.700 euros. Recientemente, desde esta entidad denunciaron el abandono de seis perros en una maleta a las puertas de la protectora. Con la imagen, pidieron dinero de la administración, que están a punto de recibir. «Gracias a las aportaciones económicas de socios y simpatizantes, y la ayuda desinteresada de clínicas veterinarias y colaboradores, tenemos un refugio con 120 plazas donde se da cobijo, alimento y atención veterinaria a casi 200 perros abandonados cada año». Estas son las palabras que utiliza la entidad para pedir fondos en sus redes sociales.

Con respecto a la caza, esta asociación deja bien clara su postura en una de sus publicaciones más recientes, que comienza con esta frase: «En la práctica totalidad de refugios para perros abandonados la mayoría de sus residentes pertenecen a razas utilizadas para la caza». En cambio, si nos damos una vuelta por sus publicaciones, vemos perros pastores, amastinados, cruces que no saben lo que es la caza, perros de compañía… Algo no cuadra con esto.

El dinero, para las páginas web

El dinero que recibirán no está destinado al cuidado en exclusiva de los animales, como cabe de esperar. También es para «mejorar su presencia en páginas web», según explica la Diputación. De las subvenciones, en las redes sociales de estas cuatro protectoras, no se menciona ni justifica nada.

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