Segundo caso de jabalí con triquina en tres semanas
Esta vez, el animal fue cazado en el término municipal de Orés, al noroeste de la provincia de Zaragoza. Se trata del segundo caso en pocas semanas, lo que evidencia, en palabras de los servicios veterinarios, la alta prevalencia de este parásito en los jabalíes de la zona.
Como sucedió en el anterior caso de jabalí con triquinosis que publicamos el pasado día 27, los servicios veterinarios de la Clínica Cinco Villas, encargados del análisis del animal, llama la atención la elevadísima carga parasitaria del ejemplar infestado.
Se destruirán todas las piezas cazadas en esa misma jornada
Los servicios veterinarios oficiales se han puesto en contacto con los cazadores, para comunicarles que la empresa gestora de residuos destruirá todas las piezas cazadas en la misma jornada, como sucedió en el caso registrado el pasado mes.
Un problema presente en la zona
Los jabalíes pueden ser portadores asintomáticos de las larvas de Triquina y estas, en caso de ser ingeridas por una persona, pueden ocasionarle la aparición de un cuadro de grave sintomatología o incluso la muerte.
Pasos a seguir para un correcto análisis de la carne de jabalí
Además de recoger de manera meticulosa las muestras de cada animal abatido como paso inicial y fundamental para una analítica segura y concluyente, los servicios veterinarios recomiendan lo siguiente:
- Recoger todos los despojos tras el faenado de las piezas abatidas. En caso de ser portadoras de triquina su vertido en el medio natural supone una fuente de contagio para otros animales (roedores y jabalíes)
- Evitar el reparto de piezas entre los cazadores participantes en la cacería hasta disponer del resultado de los análisis para facilitar la destrucción de los animales que pudiesen resultar positivos.
- Desgraciadamente, los veterinarios colaboradores estamos constatando que en muchas ocasiones no se efectúa una toma correcta de las muestras y ello pone en peligro la fiabilidad de la analítica posterior. Escasa cantidad de muestra, elección errónea de los músculos y falta de trazabilidad son los errores más habituales entre los cazadores.
- La normativa en vigor indica que de cada animal se tomaran muestras con un peso total de 150 gramos procedentes de los siguientes músculos: diafragma, masetero (carrillera) y extremidad anterior. La correcta toma de muestras es el paso inicial fundamental para la correcta determinación de la aptitud para el consumo de la carne de jabalí.
