Dos animalistas condenados por destrozos en un coto de caza

Dos animalistas de Tenerife han sido condenados por causar destrozos en un coto de San Andrés, en Santa Cruz de Tenerife, al pensar que se estaban organizando peleas de perros. Actividad completamente ilegal.


Un club de caza de San Andrés tendrá que ser indemnizado con 23.777 euros por destrozos

Ambos condenados tendrán que pagar en consecuencia una multa de 787 euros como autores penales y civilmente responsables de un delito de daños e indemnizar al club con 23.777 euros. La sentencia del Juzgado de lo Penal número cinco de Santa Cruz de Tenerife, fechada el 23 de abril, es recurrible.

Los hechos sucedieron el 25 de marzo de 2017, alrededor de las 16.48 horas, según la sentencia. José David Hernández Mesa y William Gabriel Griotti, ambos mayores de edad y sin antecedentes penales, entraron en el coto privado de caza El Cercado y causaron destrozos con una maza en el tanque de agua, propiedad de dicho Club, que era utilizado como almacén.

Ambos condenados invadieron una propiedad privada, asegurando haberse enterado por una red social que en el tanque de agua de este coto de caza se organizaban peleas de perros. Sin embargo, durante la investigación quedó acreditado que allí no se organizaban peleas de perros ni nada parecido.

William Gabriel Griotti y José David Hernández Mesa alegaron que no causaron los destrozos, sino que el tanque ya estaba destrozado cuando ellos acudieron al coto de caza para comprobar si allí se celebraban dichas peleas de perros. Además, explicaron que una vez en el tanque se encontraron con la maza.

La juez, sin embargo, consideró que estas explicaciones «no resultaron creíbles», sobre todo por la declaración de uno de los testigos, el guarda del coto, que divisó a los dos hombres, uno de ellos con pasamontañas, rompiendo el tanque que era usado como almacén de aparejos que usaban para la caza, para lo que tenían la autorización pertinente.

El guarda inmediatamente alertó a los responsables del coto, que se personaron rápidamente en el lugar y vieron a los condenados metiendo la maza en el maletero del coche de uno de ellos y cómo se quitaban la ropa, decidiendo no actuar contra ellos y avisando a la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife. Una patrulla de este cuerpo interceptó a los asaltantes en una gasolinera de Valleseco.

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