La Sociedad de Beceite denuncia el vacío contra la sarna en el nuevo Plan de Caza

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En concreto, la nueva normativa estipula que la cabra montés afectada podrá ser cazada durante todo el año si el coto así lo considera oportuno. Sin embargo, esta medida no acaba de convencer a los cazadores, que consideran que así no se evitaría un brote de sarna en sus montes. «Ahora mismo, teniendo en cuenta los medios con los que contamos, que son bastante limitados, lo único que podemos hacer los cazadores es retirar el animal afectado cuando lo veamos. No podemos hacer más», explicó Ernesto Segarra, presidente del colectivo. Reconoció que, ahora mismo, existe un vacío legal en torno al tratamiento de la sarna que impide que una regulación más profunda pueda salir adelante próximamente. «Hay vacío porque ni tan siquiera se controlan las cabras de los particulares. Se controla más a los ganaderos que tienen rebaños de cabras y ovejas que a las personas que tienen unas cuantas para autoconsumo e igual peligro hay en un caso como en el otro», lamentó el presidente. Esta situación, sin embargo, no es nueva. La sociedad beceitana ha mantenido hasta dos reuniones con DGA para intentar acercar posturas en todo este asunto. A pesar de ello, no se consiguió nada porque, según el presidente, lo único que se dijo a los cazadores es que, si llega la sarna, «llegará», sin ofrecer alternativas. «Ahora mismo, y aunque parezca fácil cazar un animal afectado, el llevar armas en el coche está muy restringido. Entonces, no sabemos muy bien cómo actuar», lamentó. Por esto, consideró que para luchar contra la sarna hace falta más personal y, a la vez, otras medidas como, por ejemplo, repartir puntos de pienso que atraigan a la población afectada y eviten, así, un mayor contagio entre los ejemplares —una labor que se ha puesto en marcha con éxito en los montes de Horta de San Juan, en Tarragona—.