Este letrado de profesión, cazador y escritor de afición —pues esta es su segunda obra impresa—, ha querido destacar el nexo de unión tan fuerte que existe entre la obra literaria más importante del mundo con la caza. Así, apuntó Ballesteros, en los primeros párrafos del libro escrito por Cervantes destaca al ingenioso hidalgo como
«gran madrugador y amigo de la caza», de ahí el título de su obra.
En ella, Santiago va desgranando los capítulos y relaciones que Don Alonso Quijano tiene con el mundo venatorio, que no son pocos, así como la interpretación de este noble arte en la época cervantina.
En su presentación además destacó que no sólo fue Cervantes el único intelectual de la época quien coqueteó con la caza, y plasmó sus bondades, sino que fueron otros muchos eruditos y artistas los que defendieron a capa y espada esta afición.
La presentación contó además con una degustación que platos típicos cervantinos, inspirados en la propia obra quijotesca, y que estuvo al cargo del chef y profesor de la escuela de hostelería, Javier Chozas, otro manchego aficionado a la caza, y quien no duda en usar como materia prima los productos derivados de la misma.
El lugar escogido para fusionar la caza, la cultura y la cocina, no pudo estar mejor escogido, pues se celebró en la instalaciones que la firma leonesa Excopesa acaba de abrir en el céntrico Paseo de la Castellana de Madrid.
En boca de su directora de marketing, Lola Fernández, pudimos descubrir un espacio no sólo pensado para el cazador y tirador, sino que será un punto de encuentro para fomentar y poner en valor todo y cuanto rodea a la actividad cinegética. Este Show Room pretende convertirse en centro de referencia para los amantes y defensores de la caza, en donde además encontrarán algunas de las marcas más prestigiosas del mercado mundial y se realizarán eventos y seminarios relacionados con este mundo.
Para concluir, queremos destacar que todo el dinero recaudado con la venta de libros que se hizo en dicha presentación fue destinada a la obra social que lleva a cabo el Padre Marista Eugenio Sanz a través de la ONG SED (Solidaridad, Educación y Desarrollo), cuyo fin es atender y ayudar a las personas más desfavorecidas de Bangladesh, y que ahora se centra en la construcción de una escuela para los más jóvenes.
