La iniciativa pretende analizar las prácticas agropecuarias, cinegéticas y forestales que se llevan a cabo en un conjunto de fincas elegidas en las comunidades autónomas de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Galicia y, evaluar el estado de conservación del medio, para a raíz de estos datos, poder proponer un catálogo de buenas prácticas.
Para ello, Aproca España propone emplear indicadores, tanto para los hábitats, como las especies incluidas en las Directivas Hábitats y Aves, y seleccionar dieciséis fincas (cuatro por cada región) que se encuentren dentro de la Red de Espacios Naturales Protegidos de cada una de las comunidades autónomas.
Durante el periodo de ejecución del proyecto Aproca España propone ejecutar distintas líneas de trabajo que se centrarían, por un lado, en realizar un seguimiento de las prácticas agroforestales en ese momento y, por otro, incluir variaciones en las condiciones de trabajo, de acuerdo con los titulares de los espacios elegidos, con el objeto de establecer conclusiones acerca de los mejores modelos a seguir.
Estos trabajos permitirían, además, obtener información fiable en cuanto a la rentabilidad económica que supone cada uno de los modelos analizados, de tal forma que se pueda encontrar un modelo que permita optimizar la preservación de la biodiversidad con la sostenibilidad económica del mismo.
Por otro lado, el proyecto pretende servir para actualizar la lista de especies protegidas existentes en las fincas cinegéticas, cotejando esta información con la que cada comunidad autónoma dispone en su catálogo regional.
Entre los objetivos globales del proyecto se contempla el fomentar el uso de los recursos naturales cinegéticos salvaguardando la sostenibilidad y el crecimiento económico y social de los territorios rurales, sensibilizando para ello, a los titulares de los acotados, de la importancia de trabajar en la custodia del territorio.
Otro de los propósitos de esta iniciativa es mejorar las relaciones, entre los titulares de los cotos de caza y las administraciones regionales competentes, en la actividad cinegética y en la conservación del medio natural.
Asimismo, lograr una mejora de la biodiversidad en los hábitats de los acotados, a través del desarrollo de las especies cinegéticas, entendiendo el conejo como una pieza clave para la preservación de las principales especies amenazas es otro de los fines que persigue el proyecto que, igualmente propondrá modificar aquellas conductas de gestión de la agricultura y ganadería que puedan ser incompatibles con la conservación de los Espacios Naturales Protegidos.
Para ello, se quieren identificar las alternativas de gestión a las prácticas no compatibles con la preservación de la biodiversidad que no supongan una alteración del balance económico.
Asimismo, otro de los fines será sensibilizar a los colectivos implicados en las potencialidades del sector como recurso natural y económico y, sobre las posibilidades de creación de empleo vinculadas a la conservación de la biodiversidad y fomento de los recursos cinegéticos.
