Asturias impulsa un proyecto que estudiará la evolución de la población de osos pardos

La Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural del Principado y la Estación Biológica de Doñana del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) están desarrollando un proyecto de investigación para estudiar la evolución de la población de osos pardos en Asturias, identificar posibles corredores de comunicación y analizar los daños ocasionados por la especie a la agricultura y la ganadería.


La investigación, que tiene tres fases y finalizará en 2010, se centra actualmente en estudiar la evolución demográfica de los osos pardos para diagnosticar el estado de conservación de la especie
El Director General de Biodiversidad y Paisaje, José Félix García Gaona, y los prestigiosos investigadores y doctores Miguel Delibes y Jon Swenson se reunieron esta tarde en la Consejería en un encuentro de trabajo para abordar los avances del proyecto. Delibes es investigador de la Estación Biológica de Doñana y Swenson es investigador y doctor de la Norwegian University of Life Sciences. La investigación tiene tres fases y su plazo de ejecución es hasta el año 2010. Actualmente, el proyecto está centrado en estudiar la evolución demográfica de los osos pardos para diagnosticar el estado de conservación de la especie. La jornada de trabajo concluyó con una visita de Gaona, Swenson y Delibes a la Fundación Oso Asturias (FOA), que tiene su sede en Proaza. El motivo de la visita es que la Fundación está patrocinando un proyecto de tesis doctoral presentado por Andrés Ordiz Fernández, titulado Análisis de patrones de movimiento y actividad del oso pardo en Europa. Aplicación a la conservación de pequeñas poblaciones amenazadas. El caso de la Cordillera Cantábrica. El patrocinio viene recomendado por los prestigiosos investigadores. La ejecución de este convenio, que arrancó a finales de 2007, tiene ya el visto bueno del Consejo de Gobierno del Principado de Asturias. En el proyecto, la aportación económica de la Consejería asciende a casi 200.000 euros. Las actividades se desarrollarán en todo el territorio asturiano. A continuación se resumen cada una de las fases. Se utilizan metodologías de seguimiento desarrolladas en el Principado de Asturias. El objetivo final, además de evaluar la tendencia y el estado de conservación de la población, será establecer un protocolo de uso de los diferentes indicadores con la finalidad de diagnosticar el estado de conservación de la población. Los análisis se realizarán utilizando, al menos, los siguientes indicadores: 1. Censos y distribución de las osas acompañadas de crías. 2. Distribución espacial y temporal de observaciones de ejemplares. 3. Índices relativos de abundancia (basados en índices kilométricos de abundancia de señales y rastros) para los principales núcleos de la población de osos. 4. Estimaciones basadas en procedimientos de captura y recaptura y elaborados a partir de análisis genéticos. 5. Registros de mortalidad segura y probable de osos, así como de índices relativos de riesgos de mortalidad para la especie (caza furtiva, envenenamientos, lazos…). Para ello, se delimitará el corredor entre las dos subpoblaciones; se elaborará cartografía de calidad de hábitat; se establecerán patrones de conectividad dentro del área de trabajo, identificando los posibles corredores o vías de comunicación dentro del área; se hará un inventario y caracterización de los elementos que puedan actuar como barreras; y se analizará específicamente la permeabilidad de la autopista A-66 a las posibilidades de tránsito entre ambos lados recurriendo, si fuera necesario, a comunidades de mamíferos “indicadoras” del problema. También se realizarán sugerencias de gestión del área de comunicación de las dos poblaciones cantábricas de osos. El objetivo es establecer una estrategia que permita diseñar programas de permeabilización de barreras e incrementar las áreas de calidad de hábitat para mejorar las posibilidades de comunicación entre las subpoblaciones.

Análisis de los daños ocasionados por la especie a la agricultura y la ganadería

Estos análisis se harán a través del estudio de las tendencias de los daños producidos sobre la ganadería y la agricultura, especialmente en las colmenas. También se evaluarán posibles cambios en los hábitos alimenticios de la especie mediante el análisis de sus excrementos. Además, está previsto colaborar con laboratorios encargados de los análisis genéticos de las muestras recogidas en los daños para, por ejemplo, intentar conocer las características de los ejemplares que los causan en las explotaciones avícolas. Esta fase del trabajo se completa con un estudio de los aspectos sociales y económicos del problema, como el análisis de las explotaciones profesionales y no profesionales afectadas y su tipología.
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