Los lobos también atacan al ganado bravo y ponen en peligro su viabilidad
En los últimos 30 días, los lobos han acabado con la vida de 42 becerros bravos, tres vacas de vientre y una novilla de la raza cherolesa. Todos de una ganadería brava en Zamora. La situación es desesperada para esta empresa familiar ante la negativa de la Junta de Castilla y León a certificar los ataques para no hacerse cargo de las indemnizaciones pertinentes.
Te mostramos en este artículo imágenes de gran dureza que reflejan a día de hoy la realidad del mundo rural en tierra de lobos. Concretamente, los que sufre la ganadería Hermanos Boyano de Paz, creada en el año 2007, año en el que ingresa en la Asociación de Ganaderos de Reses de Lidia. Las reses bravas, procedentes del encaste Aldeanueva, que forman parte de la ganadería, pastan en la comarca de la Tierra de Campos zamorana.
En los últimos 30 días, los lobos han acabado con la vida de 42 becerros bravos.
"La situación de los ganaderos españoles en las zonas que habita el lobo es insostenible"
Antonio Boyano Martínez, propietario de la ganadería Hermanos Boyano de Paz, muestra su indignación ante el calvario en el que se ha convertido su vida desde que se prohibió el control poblacional del lobo en España. A partir de esa fecha, los ataques a su ganado y a los perros protectores que lo protegen han ido creciendo paulatinamente hasta alcanzar 46 animales muertos por ataque de lobos en el último mes.
Los agentes de medio ambiente han culpabilizado de los ataques a manadas de perros asilvestrados.
Según el ganadero, este incremento en el número de ataques se debe a la imposibilidad de abatir de manera selectiva los ejemplares problemáticos y al aumento de cánidos salvajes en la zona como consecuencia del incendio que tuvo lugar hace escasas fechas en la Sierra de la Culebra.
Antonio, en la entrevista concedida a Club de Caza, cuenta que antes de producirse la prohibición de la caza del lobo sufrían seis o siete ataques al año a lo sumo, ya que se le permitía cada temporada abatir dos cánidos en la montería celebrada en las 820 hectáreas que abarcan las dos fincas en la que se encuentra el ganado bravo.
Los lobos también han matado a todos los mastines que protegían al ganado.
"La administración se niega a certificar los ataques y culpa a perros asilvestrados”
Antonio ha tomado la decisión de no notificar los últimos ataques a los agentes medioambientales de la zona. Hasta la fecha, pese a haber evidencias más que suficientes, según el ganadero, para certificar los ataques, los agentes de medio ambiente han culpabilizado de ellos a manadas de perros asilvestrados. La respuesta de Antonio a los agentes es "por qué no los abaten si están tan seguros de que son perros".
Un vaquero de la ganadería vio, la mañana del 27 de junio, cómo una manada de lobos abandonaba ante su presencia a una novilla destripada de la raza cherolesa. La res aún permanecía con vida cuando comenzaron a devorarla. La noche siguiente a este ataque, los cánidos mataron cuatro becerros bravos. La última de sus víctimas ha sido una vaca morucha de 16 años que pereció como consecuencia del ataque de una manada este lunes. A estos seis ejemplares hay que sumarle en los últimos 30 días 40 animales más.
Ejemplar de la ganadería zamorana.
Los lobos matan a los perros protectores del ganado
El ganadero ha desistido volver a adquirir mastines españoles para no condenarlos a una muerte segura. Todos los ejemplares que en los últimos meses protegían a las reses han sido víctimas de los lobos. Según la Administración, en el término de Villalpando, municipio de la provincia de Zamora, habitan 17 lobos.
El ganadero asegura que esta cifra es muy inferior a la realidad. Recordamos que el último censo oficial de lobos efectuado en España se realizó entre los años 2012 y 2014. A pesar de la falta de información actualizada, se prohibió la caza del lobo en septiembre.
Javier Fernández
