Si tu sueño es cazar dos jabalíes medallables en la misma noche, acaban de robártelo
Te contamos cómo un cazador sevillano ha logrado abatir dos monstruosos jabalíes armados con unas formidables navajas y unas largas y gruesas amoladeras. Y en solo una inolvidable jornada de caza.
Lo primero a destacar es que se trataba de una finca abierta. El mayor de los ejemplares alcanzó los 180 kilos, mientras que el segundo detuvo la balanza en 145. Las navajas de ambos jabalíes superaron los 20 centímetros.
Con 140 kilos, este fue el jabalí que se aproximó cuando los cazadores estaban fotografiando al primero.
Caza al rececho de jabalíes gigantes
El afortunado cazador que jamás podrá borrar de su memoria la madrugada del 9 de junio es el experto palomero sevillano Nacho Noguera. El cimbelero posee en Facebook una página especializada en la caza de la paloma torcaz con cimbel y es colaborador habitual de Club de Caza y del canal cinegético Iberalia. La primera semana de junio el cazador andaluz viajó junto a su padre y su amigo Moisés a tierras otomanas con la intención de abatir algún ejemplar de más de 20 centímetros de colmillo.
El mayor de los jabalíes cazados en una noche, con 180 kilos.
La primera noche de caza cumplió su objetivo. El sevillano logró cazar un espectacular animal al rececho de 200 kilos. El colmillo izquierdo del macareno mide 30 centímetros mientras que el derecho está roto. Las amoladeras son largas y gruesas. Según el guía de caza, pese a tener deteriorada una navaja, su trofeo alcanzará una puntuación merecedora de una medalla de oro.
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Dos jabalíes medallables de más de 20 centímetros de colmillo
Lo que no esperaba el jabalinero era tener la segunda noche de caza la oportunidad de realizar un doblete de jabalíes medallables en menos de una hora. Según Nacho Noguera, "la densidad y la calidad de los cochinos de las fincas que gestiona la orgánica turca Kalifer 7 Safari es impresionante". El primero de los animales fue detectado por los cazadores a las 00:30 horas en un claro del bosque a 300 metros de distancia. El hecho de que el viento fuera favorable para los recechistas evitó que el macareno pudiera detectar su presencia.
Impresionante animal abatido por el recechista.
Este hecho, unido a los conocimientos del terreno del guía, posibilitaron poner a tiro del rifle del cazador español al magnífico ejemplar. Nacho derribó al mastodóntico jabalí a 80 metros de distancia. El animal alcanzó en la báscula los 180 kilos de peso. Sus gruesos colmillos medían 23 centímetros.
Caza otro jabalí medallable mientras estaba realizando las fotos del primer cochino abatido
Mientras los recechistas y el guía se hacían las fotos pertinentes con el animal abatido, oyeron los pasos de un animal de grandes dimensiones en el monte. A tenor del ruido que emitía en su caminar, se trataba de un gran jabalí ya que en el acotado no hay ganado. Los cazadores y el guía contuvieron la respiración mientras observaban un pequeño hueco de menos de cinco metros en la espesura.
20 centímetros de colmillo y 180 kilos, un jabalí bestial.
Los reflejos de Nacho y su experiencia en la montería española hicieron posible que pudiera disparar al cochino mientras atravesaba el claro. Al preguntarle el guía al sevillano si la bala había alcanzado su objetivo asintió con la cabeza sin dudarlo. Cuando los cazadores llegaron al lugar del lance pudieran comprobar el abundante rastro de sangre que había dejado el solitario en su huida.
El guía, con buen criterio, decidió rastrearlo por la mañana. Los cazadores provistos de perros de rastro encontraron al jabalí a 400 metros del lugar del impacto. Se trataba de otro extraordinario animal con 145 kilos y 21 centímetros de navajas.
