Trofeos atípicos de corzo cazados esta temporada

Los corzos poseen seis puntas repartidas en las dos astas que conforman la cuerna. Pero esto solo es la teoría, muchas veces alterada por las anormalidades que algunos ejemplares presentan. Hablamos de atípicos trofeos que encuentran su origen en múltiples factores que pueden producir la malformación de la cuerna de manera temporal o permanente.

La genética del ejemplar es otro de los factores determinantes que permite la aparición de ejemplares coronados con extraños trofeos.

Corzo abatido en Polonia.

Deformaciones temporales

Las deformaciones temporales son consecuencia de la fractura de la cuerna del corzo una vez formada. Una vez desmogado el ejemplar desaparecerá este defecto ya que la nueva cuerna se formará sin esta anomalía. La malformación temporal del trofeo puede ser consecuencia de una pelea con otro macho o debida a un accidente.

Otra de las causas de una anomalía temporal en la cuerna de un corzo es la congelación de las astas durante su crecimiento. Las bajas temperaturas pueden provocar una vasoconstricción, estrechamiento de los vasos sanguíneos que irrigan la cuerna.

Corzo abatido en Polonia en la Sociedad de Cazadores Nyirseg de Kisvarda.

El bloqueo de la circulación de la sangre impide el crecimiento de las astas esa temporada. No es algo habitual en España.

La aparición de una infección como consecuencia de una herida es otra de las razones por la que un corzo puede presentar un crecimiento anómalo del trofeo. Las infestaciones por parásitos, el parásito compite por las sustancias alimenticias que ingiere el huésped, y en algunos casos, se nutre de su sangre, también producen estas deformaciones en las cuernas.

La parasitosis provoca la aparición de cuernas en forma de cepa de vid o retorcidas. La anomalía en las astas del macho desaparecerá si durante el periodo de crecimiento de la nueva cuerna cesa la infestación de parásitos.

Corzos con peluca abatidos en Hungría.

Deformaciones permanentes por enfermedad

Se denominan deformaciones permanentes de la cuerna a aquellas que no desaparecen el año siguiente. Las malformaciones duraderas pueden ser causadas por enfermedades y o por diversos hechos accidentales. Las causadas por enfermedades son consecuencia sobre todo de la aparición de tumores en la cabeza del animal o por infecciones crónicas en la mandíbula inferior.

Si la tumoración crece en el nacimiento de la cuerna se producirá un engrosamiento en la base o incluso la pérdida del asta. En el caso de ser debida al desarrollo de una infección esta se verá reflejada en un escaso crecimiento de la cuerna.

Otros corzos abatidos en Hungría.

Deformaciones permanentes por accidentes

Son producidas por traumas. La fractura de un pivote dará lugar a una deformidad permanente en el trofeo del ejemplar.  Si el pivote se rompe, la cuerna saldrá año tras año deformada. Como consecuencia de esta anomalía encontraremos corzos con una cuerna en caída, dirigida hacia una dirección poco común o bifurcada en su base dando lugar a corzos con tres cuernas.

Abatido en Hungría

"Corzos con peluca"

Se denominan corzos con peluca a aquellos ejemplares que presentan una malformación en la cuerna debido a un desajuste hormonal, por lo general debido a la ausencia de testosterona, o como consecuencia de un accidente que provoque la perdida de los genitales.

La alteración hormonal o la ausencia de testosterona impide que las cuernas caigan anualmente, por lo que no cesan de crecer, llegando a alcanzar grandes dimensiones. En su composición, la cuerna es porosa y sin peso ya que la acumulación final de calcio no se produce. Los trofeos de animales como este son muy codiciados por los cazadores por convertir al animal en un ejemplar prácticamente único.

Otros corzos abatidos en Hungría.

No te pierdas algunos de los corzos de cuerna atípica cazados esta temporada en España

Caza un corzo de 11 puntas, una de ellas dirigida hacia delante

La peculiaridad de este corzo multipuntas abatido en La Rioja es que una de sus puntas nace de la base de la roseta derecha y se dirige en solitario hacia adelante. El trofeo de este atípico candil además está conformado por seis puntas en la cuerna derecha y cuatro en la izquierda. Se trata de un atípico ejemplar, de los más raros abatidos en lo que va de temporada.

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Un cazador gallego abate un espectacular corzo único con una "pala" en una de sus cuernas

Diez puntas, tres de ellas en una espectacular ‘pala’. Sin duda, uno de los trofeos más extraños y, por ello, apreciados de la temporada corcera. Se trata de un corzo con 10 puntas y un grosor de cuerna fuera de lo normal.

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