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Dos machos de perdiz pelean salvajemente durante la época de celo

No hay compasión. Está en juego convertirse en el macho reproductor de la zona. Y estos pretendientes luchan duramente para quedarse con la hembra.


  perdices lucha celo
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El periodo de celo en la perdiz roja es algo variable, pero siempre dentro de unos parámetros temporales. Suele comenzar a calentarles la sangre en el mes de enero. Es cuando comienzan a retar a sus competidores con el repertorio de cantos de la perdiz roja.

Cantos amenazantes, previa a la pelea física

Una de las principales motivaciones para desplegar estos cantos es la de marcar el territorio y así dejar claro a sus posibles competidores que allí habita un macho de perdiz en plenitud de facultades. Para enfatizar aún más este factor, se suben a rocas, ramas o atalayas naturales y su voz llega más lejos aún.

Y no siempre otro macho responde. La marcada territorialidad les lleva a defender cada uno su feudo. A no ser que allí no haya hembras. Pues conquistar y defender a su dama es el objetivo final de todo esto. Pero el dominio de los cantos por parte de la patirroja llevará a hacérselo pensar a sus iniciales opositores y esos mensajes amenazantes cumplirán su función.

Picotazos, arañazos, saltos… Así son las peleas entre perdices

Pero cuando dos contendientes con el mismo grado de celo coinciden en el campo, la pugna de voces será algo que precederá a la lucha física. Picotazos, arañazos, enganchones, saltos acrobáticos… Todo esto lo podemos ver en el siguiente vídeo, que nos cede amablemente su autor.

No te lo pierdas: canto y lucha, el celo de la perdiz roja

El canto de nuestra perdiz roja

Un vídeo recoge el precioso canto de la perdiz roja. Este macho se ha colocado en una ubicación perfecta para regalarle al campo su canto. Y encuentra un oponente al que llegamos a oír durante unos segundos.

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Graba cómo dos machos de perdiz se enfrentan en pleno mes de diciembre

Dos machos pugnan entre ellos en las sierras almerienses. Una dura lucha que enfrenta a ambas perdices autóctonas que lanzan numerosos ataques con sus espolones contra su oponente.

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Graba cómo dos machos de perdiz luchan en plena época de celo por una hembra

Un macho de perdiz está emparejado con una hembra, y defiende violentamente a su pareja de la presencia de otro perdigón intruso que pretende hacerse con los favores de la perdigana.

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