Un lobo que perdió la pata hace dos años sigue vivo y cazando
Esta es la historia de Trípode, un lobo que fue fotografiado hace dos años. Llevaba la pata trasera derecha semicercenada por la trampa de un furtivo. Dos años después lo han capturado en perfecto estado físico.
La asociación que realizó las fotos en 2020 aseguran que Trípode era el alfa de la manada a la que pertenecía. En un animal más débil hubiera supuesto su muerte, pero este lobo ha demostrado que con solo tres patas sigue siendo un eficaz depredador.
Tripode lobo cojo que sobrevive
Un lazo le seccionó la pata al lobo
Su infortunio comenzó cuando su pata quedó atrapada en un lazo. Consiguió liberarse de la trampa ilegal, pero eso le costó perder la movilidad de buena parte de su extremidad. Y su merma física inspiró el nombre que le pusieron: Trípode.
Pocos meses después, la misma asociación le pudo fotografiar de nuevo, pero esta vez se le había desprendido la parte inferior de la pata. Desde entonces, no se volvió a ver o a fotografiar. Los más pesimistas llegaron a creer que el animal no superó la herida, pero recientemente la fortuna ha vuelto a permitir saber de este lobo.
El lobo fue capturado en octubre y le colocaron un collar GPS.
Capturado para una investigación
Todo esto había ocurrido en los terrenos del Parque Nacional de los Montes Sibilinos, en Italia. Hace unos meses, el equipo técnico del parque, dentro del marco de una operación para marcar con collares GPS a algunos lobos de la zona, consiguió capturar a Trípode. La herida en la misma pata le hacen un ejemplar inconfundible. Su estado físico, a parte de la pata dañada, es óptimo, marcando un peso de 28 kilos.
Tras cinco meses de seguimiento y estudio, los movimientos del lobo, lejos de estar mermados y ser cortos y pausados, se corresponden a uno de los más activos y que distancias más largas han recorrido. En ese lapso de tiempo ha dejado atrás 750 kilómetros lineales en una superficie de 178 kilómetros cuadrados.
