Dos pointers ingleses no encuentran la liebre encamada ni siquiera pisándola

Mientras uno de los perros de muestra no percibe las emanaciones que desprende la liebre, el otro can detecta que hay alguna pieza en las cercanías, pero no es capaz de determinar en qué lugar se encuentra. Llega a quedarse unos segundos parado con el lepórido entre sus patas, pero sin fijar la muestra. La liebre salta de su lugar de ocultación cuando el perro la toca con el hocico.

El perro de muestra está a punto de pisar la liebre

El cazador y adiestrador de perros de muestra turco Mehmet Gokkaya vivió una insólita situación este fin de semana cuando disfrutaba de una jornada de entrenamiento junto a dos de sus canes en la ciudad turca de Bilecik, distrito situada al noroeste de Turquía y capital de la provincia de Bilecik.

Sus pointers fueron incapaces de mostrar una liebre que previamente el cazador había detectado en su lugar de encame. El animal, pese a la proximidad del cazador y de los perros, permaneció inmóvil en su cama confiado en su mimetismo.

Ante la extraña situación, el adiestrador, móvil en mano, decidió grabar el desarrollo del lance. En ningún momento esperaba lo que iba a suceder. Ninguno de los dos perros de muestra que se dirigió hacia la liebre fue capaz de percibir las emanaciones que desprendía. Este hecho puede ser debido a la bisoñez o falta de experiencia de los perros al tratarse probablemente de cachorros, o a las bajas temperaturas ya que, como publica ADECANA, Asociación de Cazadores Navarros, "el pointer es un perro que se ha seleccionado para que solo disponga de pelo primario, no tenga pelo secundario que le protege del frío, y que además este sea corto. Además, son perros muy atléticos que acumulan poca grasa, que tampoco ayuda en la conservación del calor. Estos perros han sido seleccionados como atletas de alta competición, pero no para soportar climas extremos de bajas temperaturas".

Paco Ribes opina sobre qué ha podido evitar que los pointers detecten la liebre

Según el experto cazador y criador de pointer inglés, Paco Ribes, lo ocurrido se debe a la falta de adiestramiento de estos perros a la caza del pelo, están habituados a la caza de la pluma. Aunque también podemos encontrar la razón en la dificultad de los pointers para recibir las emanaciones que desprende la liebre. Los perros de esta raza están habituados a cazar con la cabeza levantada y no con el hocico próximo al suelo.

Las partículas odoríferas que desprenden las aves se suspenden en el aire mientras que las de las piezas de pelo no se elevan del suelo.

Otro factor determinante en este lance, según Paco, es la dirección del viento. El reconocido cazador de perros de muestra nos dice que la facilidad del perro para encontrar las piezas de caza depende en estas ocasiones de la dirección del viento. Si la emanación no le viene de frente, equivaldría a un teléfono sin cobertura.

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Un perro pisa la liebre que iba rastreando

El perro de rastro apoya una de sus patas delanteras mientras camina y pisa con ella la liebre que va rastreando. Esto hace que la presa salte del encame, sorprendiendo al can.

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No creerás lo que hace la liebre al percatarse de la presencia del cazador

La liebre que es perseguida por los perros a corta distancia se dirige hacia el lugar donde se encuentra apostado el cazador al percatarse de su presencia y de la una de sus perros que probablemente sea un cachorro toma una decisión que te sorprenderá.

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