La sarna está acabando ya con los arruís del parque natural de Sierra Espuña

La sarna es una enfermedad de la que ya hemos hablado en otras ocasiones en Club de Caza. Esta se origina por un ácaro capaz de provocar graves estragos entre especies de mamíferos y su presencia ya es fuerte en el parque natural de Sierra Espuña, Murcia, evidenciando la muerte de otros ejemplares de arruís en los próximos meses. Fuentes de LA VERDAD señalan que ha sido en las últimas semanas cuando se ha multiplicado de forma exponencial los avistamientos de grupos de animales afectados. Te contamos los detalles.

Sarna en zonas del parque

Tal y como indica el medio mencionado, se trata de una plaga que hasta hace solo unos meses estaba presente en algunas áreas de la comarca del noroeste afectando principalmente a la cabra montés en Moratalla y Caravaca de la Cruz. También se puede hablar de su presencia en los términos municipales de Mula y en menor medida de Lorca, concretamente en la zona de Zarcilla de Ramos.

Arruís con sarna en el parque

La Consejería de Medio Ambiente en Murcia no ha hecho el intento de desmentir la información este martes ante la presencia de la sarna ya en el interior del espacio natural, siendo una evidencia para quienes están en contacto con la naturaleza en la región.

Aun así, se limitan a indicar que en los últimos cuatro meses entre septiembre y diciembre se han encontrado en el área 14 arruís afectados por el ácaro. En ese sentido, un portavoz del departamento apunta a que los funcionarios responsables del control poblacional de la especie en el Sierra Espuña están ya prestando atención al problema de la sarna dando prioridad al abatimiento de animales con síntomas de la enfermedad.

Porcentajes de animales afectados

Por el momento la Administración regional no ha ofrecido datos sobre la incidencia de la patología animal, pero fuentes próximas a la Consejería estiman que entre un 25% y un 30% de los arruís de la región están afectados por la sarna en mayor o menos grado. Por ello, avanzan que será a partir de marzo cuando la sarna está más activa y pueden producirse más muertes.

Sobrepoblación de muflón

Por otro lado, en el último de los censos realizados en la región sobre el muflón del Atlas, se estima su población entre 600 y 700 ejemplares después de haber tenido que abatir otros miles ejemplares en los últimos años ya que los funcionarios de Medio Ambiente contrastaron en su día que esta especie contaba con una densidad superior y por tanto una sobrepoblación.

Caza para frenar la sarna

El simple hecho de abatir hasta el 70% o el 80% de los arruís del parque es un motivo por los que la expansión de la sarna puede verse ralentizada ahora si se tiene en cuenta que, con una densidad mayor de la especie, el ácaro puede propagarse casi sin limites entre el resto de animales.

Avisados por cazadores

Según indica el medio La Verdad, la propagación de la sarna en la zona era algo evidente ya que en años anteriores se dieron casos en muflones de Atlas contagiados.

En abril del pasado año, agentes de medio ambiente y cazadores avisaron de que había bastante probabilidad de la propagación de la plaga en el parque natural.

Ante esto, el presidente de la Federación de Caza de la Región de Murcia, Francisco Bastida aseguró en su día que «el brote es muy importante y nos tememos que finalmente va a acabar afectando a la mayor parte de la población de esta especie, además del daño que ya lleva tiempo causando entre la cabra montés. Los daños van a ser irreparables».

Importancia de la actividad cinegética

El presidente valora también de forma positiva el hecho de que en ese momento la Consejería de Medio Ambiente diese luz verde a un decreto que autoriza a los titulares de cotos de caza mayor con autorización oficial a abatir ejemplares afectados por el ácaro.

Actualmente tal situación sigue estando vigente y se traduce en una estrecha colaboración entre cazadores y técnicos de Administración regional a quien se informa del abatimiento de animales infectados para que se puedan adoptar medidas de prevención oportunas y llevar un seguimiento de las zonas con mayor incidencia.

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