La Fundación de la Montaña Asturiana impulsa estudios para la gestión y conservación de la cabra montés

Hace tiempo, en 1994, la Unión Europea propició la creación de un Banco de Recursos Genéticos de Animales Silvestres en Peligro de Extinción con la participación de 5 países, entre los que se encontraba España. En la actualidad, la preservación de material genético en bancos de germoplasma sigue siendo una prioridad en la UE, con el fin de promover la preservación de material genético de valor singular, promover la investigación y el intercambio de material genético entre países según el protocolo de Nagoya. Esta formidable iniciativa fue apoyada por la Fundación de la Montaña Asturiana, entidad cultural que desarrolla su actividad en Asturias y que fue creada en 2005 por iniciativa de su actual Presidente, Javier Navia-Osorio , que tiene entre sus fines el desarrollo de los valores de la Montaña del Norte de España, con estudios de las especies silvestres para mejorar su gestión y asegurar su conservación ante situaciones que puedan amenazar en un futuro la viabilidad de las actuales poblaciones (enfermedades emergentes, epidemias, cambio climático, etc.).

En este sentido, durante la segunda quincena de noviembre, en la finca Braña del Zapurrel, ubicada en el Occidente de Asturias y gestionada por la Fundación, se capturaron machos monteses de los que los investigadores del Departamento de Reproducción Animal del INIA-CSIC y de la Facultad de Veterinaria de Lugo (USC) procedieron a la recogida y criopreservación de semen con el fin de crear un banco de germoplasma de la cabra montés subespecie victoriae, que es la que puebla la montaña de Asturias, y es susceptible de extenderse a todas las Comunidades cantábricas y atlánticas del Norte de España. Asimismo, se investigaron nuevos procedimientos de criopreservación de espermatozoides, que aportarán nuevos conocimientos de gran valor para la conservación tanto de esta especie como de otros ungulados de montaña.

Además de un avance en el conocimiento de la especie y de propiciar la investigación, con este trabajo, la Fundación de la Montaña Asturiana pretende conservar material genético que pueda emplearse para investigación, mejorar la conservación de la especie, así como ofrecer una excelente alternativa para facilitar el intercambio genético entre poblaciones distantes y/o aisladas, evitando los inconvenientes técnicos, coste económico elevado y riesgo sanitario de capturar y translocar ejemplares vivos de unas zonas a otras, así como respetar el bienestar animal. Todo ello significa, sin duda, un gran avance que puede servir como excelente herramienta en la gestión, conservación y mejora de las poblaciones silvestres.

Teniendo en cuenta que la línea de trabajo auspiciada por la Fundación se desarrolla íntegramente con ejemplares que han nacido y crecido en la montaña asturiana y están perfectamente adaptados a las condiciones de este medio natural, este proyecto tiene una especial importancia para todo el territorio del Principado en un momento, en el que todo parece indicar, que la cabra montés va a ser declarada especie cinegética en Asturias; lo que sin duda motivará que tanto la iniciativa pública como la privada se impliquen en proyectos destinados a la gestión y reintroducción de la especie en lugares de los que desapareció hace años. Iniciativas como esta son las que realmente favorecen la conservación y la gestión de la fauna silvestre de nuestro entorno. Esta iniciativa va encaminada al desarrollo de la biodiversidad de toda la Cornisa Cantábrica, a la que han de dedicarse los frutos de esta investigación.