Una liebre contra varios galgos: una batalla en desventaja que vence con velocidad y recursos
La astucia, la resistencia y los recursos de los que hace gala esta valiente liebre ante sus perseguidores le permiten alcanzar el perdedero después de una apasionante carrera de más de dos minutos de duración. Te sorprenderá una de las tretas de la liebre para escapar de sus oponentes.
El lepórido vence a todos sus rivales en una lucha desigual a la que se van sumando uno tras otro hasta el número de cinco galgos. Los regates y los cambios de ritmo se suceden en una apasionante carrera.
Una liebre se avasalla con dos perros ‘acolleraos’. Y si se va, que se vaya
Las imágenes han sido grabadas en Sudamérica. En nuestro país, a día de hoy sería impensable una situación similar. Aquí a la liebre la corre uno o dos perros. Hacerlo con más desvirtúa una caza ancestral y de poder a poder entre los animales.
Los galgueros españoles forman un colectivo ejemplar que ha demostrado su amor por la liebre desde el primer momento en el que la mixomatosis comenzó a afectar a las poblaciones de lepóridos en la península ibérica.
Los cazadores han llegado a autovedarse su caza en los lugares en los que sucumbieron a la enfermedad gran parte de la población existente, en algunos acotados más de un 75%, o han adecuado sus cupos para no poner en peligro la especie en las zonas en las que su caza aún era viable.
La astucia de la liebre no tiene límite
La hemos visto burlar a los canes lanzándose al agua, realizar magistrales regates, efectuar prodigiosos saltos, escalar muros o hacer uso de su mimetismo para pasar desapercibidas y una vez despistados los perros volver sobre sus pasos.
En el transcurso de este lance, se refugia a una zanja excavada en el terreno a modo de canalización de agua. El lepórido elude así a los galgos que la persiguen a corta distancia. A través de esta argucia, deja a todos los canes con un palmo de narices mientras retorna al prado por otro punto del canal.
Los perros, azuzados por su propietario, vuelven a pisar los talones en una trepidante carrera a la brava liebre. En estos momentos es cuando hace gala de su habilidad para regatear a todo galgo que va saliendo a su paso. Finalmente, logra alcanzar el perdedero situado en una zona arbolada despistado así a sus oponentes.
No te lo pierdas
El instinto de supervivencia de esta liebre la lleva a lanzarse al agua y atravesar una zona empantanada
Las liebres son grandes nadadoras, pero solo recurrirán al agua cuando no les quede más remedio. Huir de depredadores o intentar difuminar su rastro las impulsan a usar el agua como método de escape.
Pulsa en la imagen para seguir leyendo:
Una liebre se ríe de unos perros de caza en su misma cara
La habilidad de esta liebre para ‘regatear’ a los perros de caza que la intentan atrapar es magistral. Sobre unas vías de tren les deja atrás una y otra vez, librándose de todas las tentativas de los canes de cerrarle el paso.
Pulsa en la imagen para más información:
Un galgo tras la liebre, lucha de poder a poder
Un solo galgo corre tras una liebre en un campo de labor. Los regates se suceden en una apasionante carrera.
Pulsa en la imagen para saber más:
No creerás lo que hace la liebre al percatarse de la presencia del cazador
La liebre que es perseguida por los perros a corta distancia se dirige hacia el lugar donde se encuentra apostado el cazador al percatarse de su presencia y de la una de sus perros que probablemente sea un cachorro toma una decisión que te sorprenderá.
Pulsa en la imagen para seguir leyendo:
