Accidentes

Un ciervo casi mata a una madre y sus dos hijas en un terrible accidente de tráfico

Un gran ciervo macho apareció de repente en la carretera y la conductora no pudo esquivarlo.


 accidente con gran ciervo
accidente con gran ciervo

Un conductor que pasó por el mismo lugar en ese momento paró y avisó a los servicios de emergencias, quedándose con la madre y sus hijas hasta su llegada. Les realizó los primeros auxilios después de que, tras girar en una curva, encontrase a la mujer pidiendo auxilio, «aterrorizada en medio de la oscuridad».

Un ciervo del tamaño de un caballo

Con estas palabras describe el conductor que ayudó a las heridas al enorme ejemplar de ciervo que saltó sobre el coche siniestrado. «Intenté hacer todo lo posible prestando los primeros auxilios y poniéndolas a salvo en mi coche a la espera de la llegada de Emergencias», relata el conductor, sin antes advertir que podría haberse enfrentado a una escena mucho peor: «Solo gracias a Dios no ocurrió una tragedia».

Los motivos que han causado el accidente

Un cazador que trabaja en Emergencias fue uno de los que acudió a la llamada del conductor. Poco después publicaba en sus redes sociales las terroríficas fotografías del accidente con un mensaje que apunta a los culpables de este tipo de siniestro:

«Trabajando en el sector de emergencias, sabes cómo funciona, puede pasar cualquier cosa. Anoche me llamaron para una operación que ocurre a menudo en mi zona del mundo. Ahora, sin embargo, hablo como cazador porque practico única y exclusivamente la caza selectiva. En Abruzzo la selección de ciervos y corzos está lejos de cualquier ideal. Esta noche, dos niñas de dos y cinco años arriesgaron sus vidas.

Viviendo en un área adyacente al Parque Nacional, ¿qué debemos pensar? Todas las semanas entre jabalíes, ciervos y corzos hay accidentes de todo tipo, se han producido muertes por ellos, pero, a pesar de todo, la comarca no quiere saber nada sobre cómo llevar a cabo planes de control y muestreo sobre estos animales.

¿Sabes por qué? ¡Demasiado queridos por los "turistas" los sábados y domingos! Mientras tanto, nosotros… ¡Vamos a contar los muertos!».

Cruda realidad de una administración que antepone los postulados animalistas a la vida y la seguridad de sus contribuyentes.

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