Cuando la caza es tu trabajo y tu pasión: Inés María Navas

La montera junto a su familia hace ya más de dos décadas decidieron promocionar el consumo de carne de caza fundando una empresa para su comercialización y a día de hoy pese a las dificultades vividas por el sector este último año continúa abierta y proporcionando puestos de trabajo.

El sector cinegético es uno de los principales motores económicos del mundo rural generando, según la Fundación Artemisan, más de 6.000 millones de euros al año y proporcionando más de 180.000 empleos. La empresa familiar Cárnicas Inés S. L. y la tienda de venta directa de productos de carne de caza Inés María son un ejemplo de ello.

Hace ya 18 años, esta familia del municipio ciudadrealeño de Porzuna, enclavado en la comarca de los Montes, ya estaba relacionada con el mundo cinegético, ya que el abuelo y el padre de Inés eran taxidermistas. Y decidieron crear una empresa relacionada con la carne caza. Dos de sus propietarios son la montera Inés María y a su hermano Genaro, su mentor en la caza, ya que su padre no era cazador pese a girar su vida entorno al mundo cinegético.

Montera y empresaria cinegética

La cazadora tuvo su primer contacto con la caza asistiendo a jornadas de menor y de liebres con galgos. La primera pieza de caza que abatió fue una tórtola común, el mismo año que obtuvo la licencia de caza, con 14 años. A los 26, en un rececho en Sierra Espuña, macizo montañoso de la Región de Murcia perteneciente a la cordillera Bética, capturó un arruí de importantes dimensiones. La cacería se la regaló su hermano Genaro por Navidad.

Era su primera pieza de caza mayor. Esa misma temporada abatió su primer jabalí y su primer muflón. Este último en una montería celebrada en la finca Valdelobillos, situada en el municipio ciudadrealeño de Retuerta del Bullaque. A la montera, en el sorteo celebrado previo a la montería, la suerte le deparó un puesto situado en cortadero. A lo largo de la mañana ninguna res reseñable atravesó el tiradero. Cuando iban a dar por finalizada la montería, dos bonitos muflones machos cruzaron el cortadero. La montera, pese a errar el primer disparo, logró hacerse con el bóvido de un certero segundo impacto en su huida por un barranco situado en la parte posterior del puesto.

En una década, que es el tiempo que la cazadora lleva practicando la caza mayor, a pesar de asistir a numerosas monterías, no ha tenido la suerte de abatir ningún animal medallable pero, como dice ella, eso qué importancia tiene. «Lo relevante son los lances que he vivido y con quién los he compartido».

Propiedades de la carne de caza

La carne de caza es un alimento único por sus múltiples propiedades y beneficios nutricionales y para la salud. Es ecológica y está repleta de minerales y vitaminas muy beneficiosas para el sistema inmunitario y el sistema nervioso. Desgraciadamente, su consumo es muy bajo pese a su alto contenido proteico y su escaso contenido graso. En España se comercializan al año más de 800.000 piezas de caza de mayor y menor. de las que en nuestro país sólo se consume un 10%.

Diversos estudios científicos realizados por la Asociación Interprofesional de la Carne de Caza (ASICCAZA) y la Fundación Artemisan, en colaboración con investigadores del Área de Tecnología de Alimentos de la Universidad de Castilla-La Mancha, avalan que estamos ante un producto beneficioso para la salud, ya que al tratarse de animales que viven en estado salvaje carece de residuos químicos, exceso de hormonas, antibióticos u otros fármacos.

Sirva de ejemplo que 100 gramos de lomo de ciervo silvestre tienen un contenido proteico de un 22% y un contenido graso inferior a un gramo, mientras que su aporte calórico es tan sólo de 93 kilocalorías. Resulta muy relevante su contenido en minerales como son fósforo, hierro, cobre, zinc y potasio y vitaminas del grupo B, como la riboflavina (B2), niacina (B3) y cianocobalamina (B12).

Colaboración de Eusebio Ezquerra, administrador del grupo de Facebook Solo Jabalí.

Teléfono de contacto empresa Cárnicas Inés S. L: 625241138

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