Condenado por provocar lesiones psicológicas a un perro de ocho meses
Se trata de la primera sentencia que tiene en cuenta aspectos psíquicos y psicológicos en España en casos relativos a animales.
La sentencia fue dictada en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Fuerteventura. En ella se condena a un hombre como autor de un delito de maltrato animal reconociendo los ataques de pánico junto al estrés crónico que el presunto autor había provocado a un perro de ocho meses de la raza pitbull.
Novedades de la sentencia
Los hechos a destacar de tal acto contemplan las lesiones psicológicas que había sufrido el animal al ser en teoría maltratado por su dueño. La sentencia no habla como tal de lesiones psicológicas, pero hace una clara referencia a las consecuencias psíquicas que tuvo para el perro el hecho de sufrir malos tratos por parte del condenado.
Sentencia pionera
El hecho de mencionar los daños psíquicos convierte la sentencia en pionera, según Bautista o al menos así lo es en Canarias y fácilmente en el resto de España. Para probar tales actos, fue decisivo un video mostrado en el juicio donde se ve la agresión que sufrió el perro.
Además, tal y como se recoge en la sentencia, el presunto autor de los hechos tenía al perro sin chip en el patio trasero de su casa, «encadenado, sin agua y sin cobijo para protegerse de las altas temperaturas».
Repetidas veces
En la sentencia se explica que el condenado en varias ocasiones golpeó al animal en la cabeza y en el cuerpo «con puños y patadas, todo ello mientras el can estaba encadenado y sin posibilidad de huida, ocasionándole además del inevitable dolor, como consecuencia de los repetidos golpes, ataques de pánico y estrés crónico, manifestado entre otros aspectos en dermatosis exfoliativa, jadeos permanentes y gestos de evitación».
Sentencia
La gravedad de lo que se ve en el video junto con los informes etológicos han influido en la sentencia, que recoge la conformidad del acusado con los hechos relatados durante el juicio, algo que señala al dueño del animal como autor responsable de un delito de maltrato animal, siendo condenado a ocho meses de prisión y pena accesoria de inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante tal tiempo.
Por otro lado, se estable una pena de inhabilitación para el ejercicio de profesión, oficio o comercio relacionado con los animales, así como para la tenencia de los mismos durante dos años y el abono de las costas procesales.
Finalmente, tendrá que indemnizar a la entidad que se hizo cargo del animal con 1.443 euros, así como el decomiso definitivo del perro que será entregado a dicha entidad.
