Cazadores y sus hijos salvan la vida de decenas de polluelos de aves acuáticas, muchas de ellas protegidas
Los pollos habían caído en los canales de riego que proveen de agua los cultivos de arroz del Delta del Ebro. Pero allí estaban estos niños y sus padres, todos cazadores, para salvarles la vida.
Las altas temperaturas reinantes en la zona no fueron excusa para que los participantes acudieran en auxilio de las aves en la jornada de salvamento organizada por la Federación Catalana de Caza, representación territorial Terres de L'Ebre.
Los cazadores, los únicos a los que parece importarles el bienestar de las aves
Como cada año, las diferentes sociedades catalanas de cazadores han organizado unas jornadas de salvamento de pollos de aves acuáticas en los canales de riego del Parque Natural del Delta del Ebro. En esta ocasión, tuvieron lugar en el municipio tarraconense de San Jaime de Enveija, perteneciente a la comarca del Montsiá, en el centro del Parque Natural del Delta del Ebro. En ella han participado cazadores junto a sus hijos para que recibieran, a pie de campo, una clase práctica de educación medio ambiental y de conocimientos del ecosistema.
Los cazadores han colocado rampas para posibilitar la salida de los animales que caen a los canales.
Salvar a los pollos
La jornada, organizada por la territorial de la federación catalana, presidida por José Pedro Tomás, y en la que colaboraron la armería de Tarrasa L'Isard junto a agentes de la dotación del Seprona del parque natural del Delta del Ebro, ha sido un auténtico éxito de participación. A cada niño se le proporcionó un caza mariposas con el que capturar, sin ocasionar daño alguno, todos los polluelos de las diferentes especies que habían caído en los canales de riego de hormigón. Las aves estaban condenadas a una muerte segura al no poder salir de allí y perecer por inanición o víctimas de los depredadores. Una vez capturadas, fueron devueltas por los niños a los arrozales.
Patrullan a diario los canales
Estas jornadas no son un hecho puntual, ya que cazadores de las sociedades de la zona patrullan a diario los canales salvando especies protegidas, como los calamones, cigüeñuelas e incluso a erizos. Es más común encontrar en el interior de las trampas mortales crías de ánades reales o fochas, entre otras especies. Los cazadores son poseedores de una autorización que les permite realizar tal labor.
Distintas rampas de material reciclado colocadas por los cazadores para evitar la muerte de animales.
Rampas construidas por los cazadores
Para remediar las muertes de aves en época de cría y mamíferos en los canales, han instalado una serie de rampas construidas con materiales reciclados, sin subvención alguna por parte de la Administración, en diferentes lugares estratégicos. A día de hoy hay un proyecto de construcción de rampas de hormigón en el que participan la comunidad de regantes, la Federación Catalana de Caza, el Parque Natural del Delta del Ebro y las administraciones correspondientes.
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