Enfermedades

Detectan leishmaniosis en el 23% de carnívoros silvestres del sur de España

Zorros, tejones, martas, erizos, gatos monteses, meloncillos, ginetas y mapaches han sido analizados. Casi uno de cada cuatro ha resultado positivo al virus de la leishmania.


 Leishmania en carnívoros España
Leishmania en carnívoros España

Un estudio llevado a cabo investiga tales infecciones en 151 carnívoros salvajes entre los que se incluyen el zorro, tejón, martas de haya, erizos, gatos salvajes, meloncillos, nutrias, ginetas y mapaches. En general se han detectado varias infecciones por Hepatozoon, Babesia y L. infantum (leishmaniosis) en el 68%, 48% y 23% de aquellos animales salvajes que han sido encuestados respectivamente. De este modo, tanto la junta de Andalucía como el Colegio de veterinarios de Murcia han advertido de la importancia de prevenir esta enfermedad en animales de compañía y humanos mediante la vacunación.

Hablan los expertos

Este nuevo estudio ha sido llevado a cabo por investigadores de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Murcia, del Grupo de Investigación en Sanidad Animal y Zoonosis de la Universidad de Córdoba y del Koret School of Veterinary Medicine de Jerusalén.

En su desarrollo han podido afirmar que los animales silvestres ya infectados con L. infantum (leishmaniosis) cuentan con posibilidades de estarlo también de apicomplejos, Hepatozoon y Babesia si se compara con las partes no infectadas.

«Informamos por primera vez de Hepatozoon martis en tejones y gatos salvajes y H. canis en martas de haya, y Babesia spp. en gatos salvajes de España», afirma el estudio.

Resultados

Además de lo mencionado hasta ahora, los resultados indicaban también que hay una distribución ya generalizada de H. canis en zorros (91%) y martas de haya (13%), H. martis en martas de haya (81%), gatos salvajes (20%) y tejones (13%), H. felis en gatos salvajes (60%), B. vulpes en zorros (64%), Babesia sp. tipo A estrechamente relacionado con B. vulpes, en tejones (58%), y Babesia spp. en gatos salvajes (20%).

Por otro lado, se ha dado con casos de infección por L. infantum en zorros (29%), martas de haya (13%), tejones (8%) y 1/3 de meloncillos.

Otras de las infecciones encontradas han sido Cytauxzoon spp. esta vez un gato montés y la primera Sarcocystis sp. en una gineta.

Tal proyecto proporciona evidencias de mayor riesgo de infección por L.infantum en aquellos animales silvestres coinfectados ya con Babesia spp. O Hepatozoon spp.

Así, expresa que estas infecciones están ya muy extendidas en carnívoros salvajes de ecosistemas mediterráneos españoles.

Leishmaniosis

Es una enfermedad parasitaria diseminada en este caso por la picadura de un mosquito infectado. Dentro de esta existen distintas formas, siendo las más comunes la cutánea y la visceral.

En el caso de la cutánea causa llagas en la piel y en el tipo visceral afecta a los órganos internos como el bazo, hígado y la médula ósea. Así, las personas que contraen la enfermedad suelen tener fiebre, pérdida de peso y un aumento de tamaño en el bazo y el hígado.

Tratamiento

En el caso de los perros que la contraen si puede hablarse de un tratamiento que actualmente consiste en:

• Antimoniato de meglumina (Glucantime.

• 75-100 mg/Kg una vez al día o 40-75 mg/Kg dos veces al día.

• Administración durante 4 semanas, pudiendo prolongarse 2-3 semanas más si la mejora no es completa en las 4 primeras semanas.

Hepatozoon C

Se trata de un protozoario apicomplexo que se encarga de parasitar los leucocitos de los cánidos. Se transmite por la ingesta de la garrapata común del perro Rhipicephalus sanguineus infectada con el parásito.

Su ciclo biológico comienza cuando la garrapata vector toma el huésped primario e ingiere los macrogamontes y microgamontes presentes dentro de los monocitos y neutrófilos sanguíneos del huésped secundario, que por norma general es el perro.

Una vez llegada en el interior de la garrapata comienza a desarrollarse la reproducción sexual que da origen a múltiples cigotos, que no migran a las glándulas salivales o boca, lo que confirma que el perro debe ingerirla para infectarse.

Ya una vez dentro del perros las formas libres de hepatozoon migran a varios tejidos corporales dentro de monocitos y neutrófilos como el bazo, médula ósea, pulmones, hígado, músculo y por tanto se produce la multiplicación activa y con ella una nueva diseminación hematógena que es la responsable de los signos clínicos que presenta el paciente.

Babesia

Esta enfermedad transmitida por garrapatas y causada por uno o más parásitos protozoarios que son del género Bbesia, los cuales por norma general se caracterizan por una lisis eritrocitica extensiva que provoca anemia, icteria e incluso muerte.

En este caso existen al menos seis especies de Babesia descritas, siendo responsables de la Babesiosis bovina. Estas son: B. bigemina; B. bovis (Syn. B. berbera, B. argentina); B.divergens; B. major; B. jakimovi y B. ovata.

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