Reclaman la devolución de las armas a dos cazadores denunciados por saltarse el confinamiento perimetral por 20 metros

Los agentes rurales también les denunciaron por practicar la caza de forma irregular. Desde la Federación se alude a un exceso de celo para cumplir con la normativa y lo atribuye a un problema de orientación con el GPS que les llevó a adentrarse a 20 metros en el Ripollès.

Una batida en terrenos colindantes

La Federación asegura que los dos hombres participaban en una batida en Castellar de N'Hug (Berguedà) cuando traspasaron los límites por error y en una distancia tan mínima. También se acude a que la actuación y la forma con la que se dio a conocer la denuncia contribuye a «dar mala imagen» del colectivo y pide «más comprensión».

Un error de localización por seguir el protocolo anti Covid

Los dos cazadores denunciados admiten que cuando se les dio el alto estaban en el Ripollès, ya que el GPS marcaba que «habían cruzado el límite del término por poco más de 20 metros». Pero aseguran que llegaron hasta allí por un problema de orientación de la zona, ya que acabaron en una carretera sin salida, y se vieron obligados a atravesar un curso fluvial que marca el límite entre Berguedà y Ripollès. Y lo hicieron aplicando los protocolos antiCovid, «para evitar el riesgo de contagio».

Les requisaron las armas

Los agentes rurales les requisaron las armas de caza por una infracción que creen que es «del todo menor». Por ello, la Federación ha realizado un comunicado quejándose de que la Generalitat «muestra más consideración hacia fiestas ilegales de fin de año que hacia los dos cazadores que, por un error de orientación, quebrantaron el confinamiento comarcal por tan sólo 20 metros».

Y la Federación exige que se les devuelvan

Por todo esto, la entidad federativa de Girona reclama la devolución de las armas a sus propietarios y pide, de aquí en adelante, comprensión hacia esta actividad que resulta esencial para el entorno natural en el que se realiza.